El pleno del Ayuntamiento de Albaida ha elegido hoy alcalde a Juan Carlos Roses, candidato del Partido Popular, con siete votos favorables, cuatro en contra y una abstención. En sus primeras palabras como primer edil de Albaida ha hecho un llamamiento a la colaboración de toda la corporación municipal: “Empieza una nueva etapa en este ayuntamiento. Como alcalde estaré abierto a que todo el que quiera colaborar, trabajar y ayudar a hacer una Albaida mejor, pueda hacerlo. Mi mano está tendida y la puerta de este ayuntamiento, abierta. Quiero ser el alcalde de todos, sin distinciones, y a todo el mundo le agradezco este honor. Por encima de ideologías y partidos, está el bien de Albaida”.
Juan Carlos Roses ha incidido en que la prioridad de su gestión será mejorar la situación económica de Albaida y gestionar de la mejor manera los recursos para mejorar los servicios públicos de la localidad. El nuevo alcalde ha incidido en la necesidad de un cambio en el gobierno municipal de Albaida, por la insostenible situación política en que había quedado el anterior alcalde de Compromís, Alejandro Quilis, tras perder el apoyo de los concejales socialistas.

El nuevo alcalde se ha mostrado convencido de la capacidad de Albaida para superar las dificultades y se ha comprometido a trabajar para aportar soluciones a los problemas de los vecinos: “Os aseguraré que dedicaré todo mi esfuerzo a mejorar nuestra querida ciudad. Tenemos un gran patrimonio histórico, cultural y natural. Pero el mayor patrimonio de esta tierra es su gente: personas trabajadoras que queremos una Albaida mejor para nosotros y nuestros hijos. Esa es nuestra misión y estoy seguro que, con vuestra ayuda, será posible”.

Vila y Sempere recuerdan que "el aval a la moción fue decidido y aprobado por la ejecutiva del PSOE local"

En la presentación de la moción han tenido un papel fundamental los ya ex concejales socialistas Cristina Vila y Pau Sempere, quienes apoyaron la presentación de la misma, Sempere votó en el pleno a favor, mientras que Cristina Vila se abstuvo.
En el mismo pleno hacían llegar a los medios de comunicación un comunicado en el que exponían que "las negociaciones para tratar la moción con el PP las inició el sr. Palací, no nosotros". Añadían, además que la "moción contaba con el respaldo unánime de la ejecutiva del PSOE local. Las razones para avalar dicha moción se debían a la situación insostenible y de total abandono en la que se encuentra el Ayuntamiento de Albaida".
Vila y Sempere defienden en su comunicado que el acuerdo de gobierno entre PSOE y Compromís fracasó "por la falta de sintonía con Compromís y la falta de diálogo" de los líderes de ambas formaciones, Palací y Quilis.
Entienden estos concejales que ante la situación de minoría en la que se quedaba Compromís y ante la "dejación de funciones" del alcalde Alejandro Quilis "el PSOE decidió actuar en beneficio de la ciudad", pero añaden, "determinados barones del PSOE de Albaida, que han actuado siempre a la sombra utilizando a los políticos electos como puras marionetas, empezaron a mover los hilos en la estructura tanto comarcal como provincial del partido al no prestar conformidad con la decisión de la ejecutiva".

Amenazas a Palací si apoyaba la moción
Añaden Cristina Vila y Pau Sempere que David Palací, "ante las advertencias de ser expulsados del partido si apoyaba la moción, decidió de motu propio, suspender las negociaciones, en un gesto egoísta, de carácter personal y velando únicamente por sus intereses y su futuro en el partido, dejando de lado la estrategia de salvar al Ayuntamiento de la situación en la que se encontraba".
Ellos, en cambio, explican en su comunicado que no cedieron "ante las amenazas del partido de ser expulsados, porque situamos por delante los intereses del municipio y de su Ayuntamiento a los del partido".
Cristina Vila y Pau Sempere lamentan "que el pacto progresista entre Compromís y PSOE fracase. Nosotros vivimos personalmente la falta de sintonía y la inacción de ambos líderes durante los 126 días que duró el pacto". Los dos concejales expulsados del PSOE añaden respecto a Quilis y Palací que "ni estaban ni se les esperaba. Dicha sensación de inexistencia de capitanes que tripulasen el barco no solo la teníamos nosotros, sino también una gran parte de los trabajadores municipales. El barco iba a la deriva y nadie actuaba para evitarlo".
En su comunicado, reafirman ambos concejales que la decisión la han tomado "en un ejercicio de responsabilidad personal por el bien de Albaida, dejando de lado las cuestiones ideológicas y tratando de velar por el adecuado funcionamiento del Ayuntamiento de Albaida".