El Ayuntamiento de Albaida ha renunciado y desistido, en tan solo 3 días, a subvenciones aprobadas, solicitadas o concedidas, por valor total de 124.000€. Según el portavoz socialista, David Palací, “resulta lamentable que el Partido Popular decida prescindir de unos recursos totalmente imprescindibles para nuestro pueblo”.
Entre las distintas subvenciones perdidas se encuentran: la de rehabilitación de viviendas para alquiler social, la de restauración de piezas auxiliares relacionadas con el toque manual de campanas, la de redacción de proyectos de vías de ciclo-peatones de interés natural, las de prevención de incendios forestales y, por último, la de acciones de promoción del comercio y artesanía local (bono comercio).
Especialmente significativa y clamorosa es la renuncia a esta última del “bono comercio”. En palabras de Palací “se trata de una subvención que me conozco muy bien, puesto que fue gestionada, impulsada y dirigida por mí el año pasado cuando gobernábamos. La campaña de venta fue todo un éxito; agotándose los bonos en solo 48 horas”.
Para el concejal socialista “supone una absoluta negligencia perder una ayuda que no le cuesta dinero al Ayuntamiento, que beneficia a consumidores y empresarios y que, además, hubiera posibilitado inyectar 90.000€ en la economía local. El alcalde ha despreciado a los autónomos, a los pequeños comercios y ha impedido que el vecindario disponga de un dinero que les aligere el precio de la cesta de la compra”. Muchos albaidenses utilizaban el bono para adquirir ropa, víveres o material escolar en épocas de gran gasto (como la vuelta al cole o las fiestas patronales del municipio). “Ahora, desgraciadamente, esto ya no será posible”, añadía.
Aun así, en 2023, bajo la alcaldía de Compromís, ya se perdieron subvenciones por valor de un millón de euros y, con el gobierno del PP, parece que la cosa continúa por el mismo camino, critican los socialistas.
Para los socialistas, las excusas y explicaciones ofrecidas por el alcalde "no tienen ningún tipo de sentido". “Por un lado, se señala que no hay dinero para financiar la parte que no cubren las subvenciones, pero, no obstante, sí que hay para adquirir nuevas banderas de España con que engalanar el balcón del consistorio y eliminar la Señera; o continuar pagando productividades y gratificaciones a los trabajadores públicos. Unas gratificaciones que, en el caso de la policía -y según los informes de los técnicos- son plenamente ilegales y ya duplican las cuantías inicialmente presupuestadas”, expone el portavoz socialista.
El problema de fondo, añade Palací, "es que no hay rumbo ni dirección. Que no hay un plan de tesorería que priorice y racionalice los pagos. Nos encontramos ante una carencia absoluta de planificación y organización, de ineficiencia e inoperancia; actuándose por impulsos y de una manera totalmente caótica”, remataba el portavoz socialista.