La cuna en la que durmió Alfonso XII cuando era un bebé y que la reina Isabel II regaló a Enrique Puigmoltó (Ontinyent 1827-1900) está a la venta en Antigüedades Llorens, de Xàtiva. La cuna formó parte de una serie de objetos que la familia propietaria vendió a través de una subasta en una tienda de Valencia, pero finalmente la pieza no fue comprada. Así, 4 años después, por la buena relación que mantienen con los responsables de Antigüedades Llorens, decidieron ponerla de nuevo a la venta en esta tienda de Xàtiva.
Antigüedades Llorens tan solo vende objetos y obras de arte que son de su propiedad, pero en este caso, han hecho una excepción para gestionar la venta de un objeto que no es suyo, sino de los descendientes del conde de Torrefiel.
La pieza, explica Luis Llorens, es de un alto valor artístico, por su notable factura técnica, sus acabados de gran calidad (madera de ébano y palisandro), así como por su buen estado de conservación. Por todo ello, desde Antigüedades Llorens explican que aunque no se sabe quién la fabricó, la lógica indica que es obra de alguno de los ebanistas que trabajaban para la casa real.
Además del valor artístico que tiene, la existencia de esta pieza, regalo de Isabel II a Enrique Puigmoltó y Mayans, III conde de Torrefiel y I vizconde de Miranda, vendría a ratificar la teoría de que el militar y aristócrata sería el padre de Alfonso XII.
La cuna no solo ha despertado el interés de algunos posibles compradores, sino que también la tienda ha incrementado las visitas de personas de Xàtiva que, atraídos por la curiosidad de ver en persona esta cuna, se acercan para contemplarla.
Explica Luis Llorens que este no es el primer objeto que pasa por su tienda que tiene vinculación con la reina Isabel II, ya que por sus manos también pasó un mueble-escritorio fabricado con las antiguas puertas de El Escorial, en lo que fue otro regalo de la reina a Enrique Puigmoltó.