Ya advertía el técnico del Ontinyent 1931, Roberto Bas, que no por existir 50 puntos de diferencia ente su equipo y el colista, el Muro, el partido iba a ser fácil. Prueba de ello es que el Muro llegó a ponerse 0-2 en el marcador, con autogol de Alexandru incluido. El Muro se quedó con 10 jugadores en el minuto 46 por expulsión de Diego justo al inicio de la segunda parte.
Con mucho esfuerzo, el Ontinyent empataba gracias a los goles de Alberto Botella (70) e Iván (83) y en el 93 Rafeta de penalti ponía el que parecía el gol de la victoria. Pero en un partido que fue una auténtica locura, en el 96 el Muro empataba para poner las tablas en el marcador, con otro gol en propia puerta, obra de Jorge García.