Semana de muchas sensaciones opuestas en El Clariano. De la dura derrota ante el Soneja el domingo el Ontinyent 1931 pasaba a la alegría por el 2-0 ante el Benidorm, un resultado que saca al equipo de los puestos de descenso y que le hace afrontar el partido del domingo, de nuevo en El Clariano, con un poco más de tranquilidad.
Los dos goles de Víctor Revert y de Cambreta sitúan al Ontinyent con 19 puntos, los mismos que el Crevillente (que tiene un partido menos) y uno menos que Atlético Levante y Jove Español.
Y es que la serie de tres partidos en casa estaba fijada en el calendario como un punto clave para que el equipo pudiera salir del pozo y entrar en una dinámica positiva. Aunque el resultado contra el Soneja fue un jarro de agua fría, especialmente por las muchas ocasiones que el equipo de Roberto Bas desaprovechó, la victoria ante el Benidorm abre una puerta a la esperanza: una victoria ante el Rayo Ibense permitiría afrontar la segunda vuelta con mejores perspectivas.
Ahora bien, llega a El Clariano un equipo, el Rayo Ibense, que ya sorprendió al Ontinyent en el partido inicial de la liga, con una victoria para los alicantinos que le hizo empezar la liga con mal pie, algo que el equipo ha ido arrastrando durante gran parte de la primera vuelta.
Además, el equipo de Ibi llega con dos victorias consecutivas: el pasado fin de semana en la Ciudad Deportiva del Levante y en la última jornada del año pasado ganaron 2-0 al Benidorm. Por ello, no cabe excesos de confianza ante un rival que parecía desahuciado hace unas jornadas pero que ahora busca una victoria que le metiera de lleno en la lucha por eludir el descenso.