La vicepresidenta 1ª de la Diputación de València, Natàlia Enguix, ha librado los premios del programa “La Memoria en la Escuela”, impulsado desde el área de Memoria Democrática de la institución provincial de la que también es responsable, y que este año ha galardonado, entre otras, a dos trabajo de alumnos del IES Jaime I de Ontinyent. En concreto, el certamen se centraba este año en los movimientos de población forzados por conflictos durante los siglos XIX y XX, resultando ganador de un segundo premio el trabajo ‘Armenia: fragmentos de una historia olvidada’, de Larisa Avestisyan (IES Jaume I de Ontinyent); y de un tercer premio el trabajo ‘De Bucaresti en Ontinyent’, de Carla Bartha e iris Ana-Maria Cäluean (IES Jaume I de Ontinyent).
En el acto de entrega de los premios, al que las alumnas ganadoras acudían acompañadas por el profesor del IES Jaume I Francisco Valero y los concejales ontinyentins Álex Borrell (Cultura) y Ferran Gandía (Educación), Natàlia Enguix felicitaba el alumnado galardonado de unos premios “con los que queremos poner en valor la democracia y los derechos humanos, para que la gente joven conozca la importancia de que la historia no se vuelva a repetir, y que la historia se cuente tal como pasó”. Francisco Valero hacía una valoración “muy positiva de estos premios, puesto que en estos tiempos tenemos que saber de dónde venimos y recordar al alumnado la tragedia vivida en España y también a otros países, como el genocidio en Armenia o la dictadura de Ceaucescu en Rumanía, sobre los que han versado los trabajos de nuestras alumnas”.
Enguix, acompañada por las diputadas Rocío Gil, Dolors Gimeno y Lola Celda, y los diputados Paco Teruel y Avelino Mascarell, agradeció el esfuerzo de todos y todas las participantes y animó a la participación del alumnado de toda la provincia a la participación en la VI edición de los premios en 2025, que se publicará próximamente con el tema ‘Las mujeres, las primeras guardianas de la memoria’ y donde podrán participar alumnos de FP básica además de los de 4º de la ESO y 1º y 2º de Bachillerato. Como curiosidad, los premios entregados al alumnado y los tutores son pequeñas olivos que simbolizan la victoria, la paz y, en algunas tradiciones, la memoria por la longevidad del árbol. “Animamos a los ganadores a trasplantar en sus centros estos árboles para extender la raíz de la memoria que hoy ha reconocido vuestros trabajos”, concluía Natalia Enguix.