El pasado día 8 de octubre contrajo matrimonio en Austria la ontinyentina Maite Gnjezda Soler. Aunque residente desde joven en Austria, porque fue el país en el que se establecieron sus padres, el geólogo austriaco Gregor Gnjezda y la ontinyentina Carmina Soler Mataix, nunca ha perdido los vínculos con Ontinyent y con su familia materna.
Nieta de Salvador Soler y Pepita Mataix, Maite es psicóloga y contrajo matrimonio con Stefan Klinglmüller, un joven arquitecto, en Linz, una preciosa localidad en la Alta Austria,  en un día en el que tuvieron un sol radiante que aún hizo más memorable la jornada para el nuevo matrimonio y todos los asistentes al enlace.
En una entrevista con LOCLAR en el año 2005, su madre, Carmina Soler, explicaba lo importante que era para ella que sus hijas tuvieran una educación bilingüe. Por ello, pasaban los veranos en la casa familiar de Ontinyent, de manera que sus hijas no solo pudieran aprender y mejorar su conocimiento del español, sino también “que se sientan de Ontinyent y que tengan raíces valencianas”, explicaba cuando eran unas niñas.