Que este año no habrá Fiestas de Moros y Cristianos es ya por todos sabidos. La pandemia llevó a tomar una decisión histórica ante la incertidumbre que se cernía y aún gravita sobre la vuelta a la normalidad y las consecuencias de la crisis sanitaria vivida.
Ahora bien, son muchos los ontinyentins a los que se les hace muy duro pensar que este verano no podrán ver al patrón recorrer las calles de la ciudad, bajar desde Santa Ana, atravesar el pont Vell, aparecer por el porxet, etc, etc.
Es por ello que desde loclar.es se planteó una encuesta para conocer el sentir general de los ontinyentins sobre la posibilidad de que, si las circunstancias sanitarias lo permitirían, llegado agosto el patrón bajara a la ciudad.
En concreto, el 42% de los 1.200 participantes se mostraba a favor de que el Cristo bajara; a lo que hay que añadir el 17% que, además de partidario de la bajada, también optaba por la opción de que, además, se celebrara el novenario.
Del total de participantes, el 40’8% consideraba que no era buena opción la bajada del Cristo.
En todo caso, las celebraciones religiosas que se puedan realizar llegada la semana de Fiestas, dependerán de las circunstancias del momento y las indicaciones de las autoridades sanitarias y religiosa.