Un espectáculo pirotécnico con 200 kilos de pólvora homenajeaba en la noche del pasado sábado a las fiestas patronales en honor a la patrona de la ciudad, la Purísima Concepción, que tuvieron que suspender la gran mayoría de actividades que tradicionalmente tenían lugar en estas fechas.
El acto, organizado por la concejalía de Fiestas y ejecutado por la pirotecnia Aitana, estaba previsto inicialmente para el día previo a la festividad de la Purísima, el pasado lunes 7 de diciembre, a pesar de que se tuvo que aplazar por los fuertes vientos registrados esa semana. Finalmente, el espectáculo tenía lugar el pasado sábado en la zona de Benarrai, y fue contemplado durante alrededor de 10 minutos por miles de ontinyentins desde sus domicilios.
La edil de Fiestas, Àngels Muñoz, destacaba el simbolismo del acto, "que representa que no tenemos que perder la esperanza", y animaba a la ciudadanía “a seguir atendiendo a las recomendaciones de las autoridades sanitarias, para poder mantener la tendencia a la baja en los contagios que estamos registrando a las últimas semanas en la ciudad”, manifestaba.