Partido Popular de l'Olleria denuncia graves desperfectos en la carretera de acceso al municipio, así como en las vías anexas y el carril bici. Unas graves deficiencias que en palabras de su presidente local, Javier Albero, “se deben a la desatención y la dejadez por parte de la Diputación Provincial. Un abandono que constituye ya un verdadero riesgo para los usuarios”.
Los populares enumeran desperfectos tales como grietas en mitad de la carretera, raíces que levantan el pavimento, vallas deterioradas o vegetación que invade parte del vial.
“La suciedad que aumenta cada día se ha convertido en un peligro para la seguridad vial, más si cabe cuando sufrimos también el deterioro de la señalización y los desprendimientos que invaden la mitad del carril bici”, ha criticado el presidente local de los populares.
Ante este abandono, desde el Partido Popular de l'Olleria, demandan que se acometan con urgencia las tareas de mantenimiento, conservación y la limpieza de la carretera de acceso al municipio “antes de que se tenga que lamentar alguna desgracia”.
Tal y como afirma Javier Albero, “urgimos a la adecuación inmediata de la carretera, sus viales anexos y el carril bici puesto que la seguridad de nuestros vecinos no puede estar a merced de la falta de voluntad política de los políticos socialistas y de Compromís que gobiernan la Diputación”.
Para el presidente local “No es de recibo que tareas y servicios tan sencillos de solucionar como reparar el firme, podar o limpiar las cunetas no se lleven a cabo. Estamos ante una falta absoluta de compromiso y voluntad de trabajo por parte de la Diputación presidida por los socialistas que perjudica gravemente a L’Olleria. Están deteriorando la puerta de entrada al municipio hasta convertirla en un punto negro”.
Desde el Partido Popular lamentan que “pese a ser el segundo municipio de la comarca de la Vall d'Albaida, el mal estado de los accesos sumado al desinterés de los actuales gestores de la Diputación y la desidia del gobierno municipal están sumiendo a l’Olleria al aislamiento. No hemos transformado en un pueblo fantasma para el visitante”.