La Colla ecologista l’Arrel está llevando a cabo el estudio ‘La distribución y la ecología de la nutria en Ontinyent y comarca’, una iniciativa que surgió en el seno del Consell de Medi Ambient y que fue aprobada para su desarrollo, con un presupuesto de 11.000€.
El estudio fue presentado este miércoles por el portavoz de la investigación, Gustau Calabuig; la concejal de Sostenibilidad, Sayo Gandía, y el presidente de l’Arrel, David Gironés, quien consideraba esta colaboración como “muy importante”, ya que esperan tenga continuidad y sea el inicio de una nueva etapa en la que “las instituciones locales apuesten por las investigaciones locales”.
Uno de los principales objetivos de esta investigación, en la que están participando biólogos y veterinarios vinculados a l’Arrel, es determinar los motivos por los que la nutria (lutra lutra) está en expansión en Ontinyent y la Vall d’Albaida. Aunque el estudio se encuentra en su tramo inicial, todo parece apuntar a que el principal factor de esta recolonización es “el cese de la persecución directa” a esta especie y otros factores como la instalación de depuradoras, que “han mejorado la calidad de las aguas”, tal y como explicaba el portavoz, Gustau Calabuig.
Las áreas de estudio de la investigación se han dado en 18 puntos de la Vall d’Albaida, en zonas como barrancos o ríos (Clariano, Albaida y Micena), en los que se están estudiando variables como el curso del agua, la vegetación o taludes, a través de un registro de datos proporcionado, entre otros, por los propios indicios, como huellas o excrementos, y por cámaras de fototrampeo, que han permitido realizar vídeos, tanto diurnos como nocturnos, de la fauna local.
El estudio está permitiendo además realizar de manera transversal una radiografía de la realidad del ecosistema local y se han extraído algunos resultados positivos, como la presencia de especies de interés como la rata de agua (arvicola sapidus), la tortuga acuática autóctona (mauremys leprosa) o el búho real (bubo bubo). Sin embargo, en el plano negativo también se han detectado especies invasoras como la tortuga de Florida, “que desplaza a galápagos autóctonos y transmite enfermedades”, tal y como explicaba Gustau Calabuig; el cangrejo de río americano o la planta ludwigia peploides, una especie de planta acuática que “se introdujo en Francia y que ya ocupa parte de la cuenca mediterránea”, que puede llegar a cubrir y quitar luz a los ríos, lo que “altera el equilibrio de otras especies”, continuaba.
El estudio también tendrá un fin divulgativo, por ello mañana, 26 de junio, tendrá lugar, a partir de las 9:30 horas, un taller dirigido al público general en la Casa de Cultura-Palau dels Barons de Santa Bárbara, y además, se está preparando un audiovisual, a partir del cual se pretende crear unidades didácticas que pueden servir para que los centros educativos lo incluyan en su programación.