"Aquí se fomenta la inversión y, por ello, las empresas presentan ofertas muy tentadoras” - loclar

En las pasadas ediciones de “Ontinyentins pel món”, este periódico ha tenido la oportunidad de “viajar” a países tan emblemáticos como Alemania, Suecia, Irlanda, Noruega e, incluso, hemos tenido la suerte de cruzar el charco hasta Estados Unidos o México. Esta vez, nos “desplazamos” a Abu Dabi con Andrea Tortosa Ferrero, la ontinyentina que ha hecho de esta vibrante ciudad de los Emiratos Árabes Unidos su nuevo hogar. 

Dicen que cuando una puerta se cierra, otras muchas se abren. Esto es lo que ocurrió cuando, mientras el mundo se sumía en incertidumbres, a la pareja de Andrea le ofrecieron una oportunidad laboral en Abu Dabi. Sin duda, él decidió dar el salto y mudarse a la capital de los Emiratos Árabes Unidos en octubre de 2020. La ontinyentina, por su parte, mantuvo la relación a distancia, pero aprovechaba cada oportunidad para visitar la ciudad. Durante sus visitas trimestrales, la fascinación de Andrea por Abu Dabi se intensificaba por momentos: "Cada vez que venía me gustaba más. Veía las oportunidades, el dinamismo de la ciudad y el estilo de vida como algo increíble. Y, por supuesto, tener a mi pareja aquí fue un factor clave".

Tras varios viajes y reflexiones, decidió que también quería formar parte de esa aventura. Como profesional de los recursos humanos, comenzó a buscar trabajo activamente, y fue en septiembre de 2022 cuando le llegó la oportunidad que cambiaría el rumbo de su vida: un contrato fijo en su sector. “No lo pensé dos veces. Sabía que era la oportunidad que estaba buscando”, recuerda.

Uno de los aspectos que más sorprende a Andrea es la calidad y cantidad de oportunidades laborales que ofrece Abu Dabi. En su sector, los recursos humanos, ha podido comprobar de primera mano cómo las empresas buscan atraer talento internacional con sueldos competitivos y beneficios atractivos. "Aquí se está fomentando mucho la inversión y, por ello, las empresas presentan ofertas laborales muy tentadoras para atraer a buenos profesionales", confirma.

Tras escuchar sus declaraciones, concluimos que Abu Dabi no es solo un centro de negocios; también ofrece una experiencia laboral distinta. "Aquí las empresas no solo buscan ofrecer un buen salario, sino que también se preocupan por el bienestar de los empleados y sus familias. Tienen políticas muy enfocadas a la calidad de vida, pues ofrecen beneficios relacionados con la salud, la vivienda y la educación para toda la familia", comenta Andrea. 

Es así como el mercado laboral en los Emiratos no solo busca profesionales cualificados, sino que también facilita la integración de los mismos en la sociedad, por lo que proporcionan un ambiente en el que se puede prosperar tanto a nivel personal como profesional. “Cuando buscan atraer talento, tienen claro que los candidatos dejan atrás su país, su cultura, sus familiares y sus amigos; es decir, sus vidas. Por lo tanto, las condiciones laborales deben ser muy potentes para que la balanza salga positiva”, comenta la ontinyentina. 

No obstante, Andrea también advierte que es difícil conseguir trabajo en Abu Dabi desde el extranjero: “Es más fácil encontrar oportunidades una vez que ya estás aquí instalado. Tienes que moverte, hacer “networking” y, sobre todo, diferenciarte de los demás”. Se trata de un consejo que resuena especialmente en un mercado laboral tan competitivo como el de los Emiratos, donde es crucial destacar entre la gran cantidad de candidatos en busca de empleo.

A nivel personal, Tortosa ha descubierto que Abu Dabi no solo le ofrece oportunidades laborales, sino también una vida social muy activa. "Aquí el año se divide en dos estaciones: verano e invierno. Durante el invierno, que empieza en octubre o noviembre, la ciudad se llena de conciertos, eventos deportivos y festivales. Si eres una persona activa, puedes mantener un estilo de vida lleno de actividades y deporte sin problema", asegura entusiasmada. 

Eso sí, advierte que la cantidad de actividades y eventos puede ser un "peligro" para el bolsillo. "Es fácil caer en la tentación de gastar lo que ahorras, porque todos los días puedes hacer algo nuevo. Hay planes para todos los presupuestos, pero si te gusta salir y vivir experiencias, Abu Dabi tiene un sinfín de opciones". A pesar de ello, Andrea asegura haber encontrado un buen equilibrio entre disfrutar de la vida social y mantener un balance económico.

Por otra parte, una de las sorpresas más gratas para Andrea ha sido la hospitalidad de los locales. Aunque esperaba encontrar diferencias culturales marcadas, su experiencia ha sido todo lo contrario: "Más allá de que tengamos culturas diferentes, los abudabíes son personas muy respetuosas y abiertas. Están acostumbrados a convivir con personas de todas partes del mundo, y eso se refleja en su actitud". Con ello, concluye que, en un país donde los nacionales representan solo un 20% de la población, la diversidad es la norma.

La comparación entre la vida en Abu Dabi y en España ha sido inevitable en esta entrevista. Aunque desde el primer momento echó de menos ciertos aspectos de la cultura española, pronto se dio cuenta de que la vida en los Emiratos no era tan diferente en algunos aspectos. "Los horarios y las costumbres son muy parecidos a los nuestros. Les encanta la sobremesa, son muy familiares, y suelen reunirse con amigos y familiares para compartir comidas, algo que me recuerda mucho a España", explica.

Además, en términos de alimentación, Andrea ha descubierto que puede encontrar la mayoría de los ingredientes que solía usar en España. "Aquí puedes comprar alimentos básicos españoles sin problema. Lo único que cambia es cómo los combinan. Por ejemplo, en las comidas suelen compartir platos típicos árabes, como las ‘picadas’, para el centro de la mesa, algo que también es común en nuestras comidas familiares”, asegura.

Lo que realmente sorprendió a Andrea fueron los precios. "Si los comparamos con España, me ha sorprendido que la diferencia de precio no es tan grande como pensaba, y en algunos casos, incluso pagamos menos por ciertos servicios, como la electricidad o la gasolina". Mientras en España esos servicios suponen un gasto considerable, en Abu Dabi, el coste es mucho más bajo. “Pago entre 7 y 10 euros por la factura del aire acondicionado, algo impensable en España”, denuncia. Sin embargo, también otros servicios, como el internet, son más caros en los Emiratos debido a la escasa competencia entre compañías. 

A pesar de las diferencias y los retos, Andrea considera que en su momento tomó la decisión correcta al mudarse a Abu Dabi. Si bien extraña a su familia, amigos y, por supuesto, la comida española, en especial el arroz al horno, se siente agradecida por la oportunidad que ha tenido. "Echo de menos a mis seres queridos, pero siento que estoy aprovechando una oportunidad única que me ha dado la vida. Mientras dure esta etapa, la voy a exprimir y disfrutar al máximo", concluye.

Una vez más, esta historia es un ejemplo de cómo las oportunidades pueden aparecer en los momentos más inesperados y cómo, con determinación, es posible adaptarse a un entorno cultural y profesional totalmente diferente. Aunque su corazón siempre estará en Ontinyent, Abu Dabi se ha convertido en el lugar donde Andrea está escribiendo un nuevo capítulo de su vida, lleno de desafíos y recompensas. Un caso de éxito y adaptación que nos recuerda la importancia de aprovechar al máximo cada oportunidad que la vida nos ofrece.