El domingo, el Monasterio de las Carmelitas de Ontinyent celebraba la clausura de su 450 aniversario. Una eucaristía presidida por el arzobispo de Valencia, Enrique Benavent, ponía final a unos meses intensos en cuanto a actividades como conferencias, la visita de la Purísima o el concierto del Nou Orfeó celebrado la semana pasada.
En su homilía, el arzobispo remarcaba en su homilía el legado espiritual de las Carmelitas.
Esta eucaristía de clausura del 450 aniversario era concelebrada por una amplia representación de sacerdotes de Ontinyent, así como del alcalde y de la concejal de Fiestas.