El fin de semana dejó en Ontinyent dos positivos por alcoholemia. Así, la noche del sábado al domingo, en la avenida Ramón y Cajal, sobre las 4:30 de la noche, la policía observó un vehículo que estaba realizando maniobras extrañas. Al pararlo, los agentes rápidamente observaron que el conductor estaba ebrio. Las pruebas de alcoholemia practicadas dieron positiva. Aunque se había avisado a la grúa para la retirada del vehículo, finalmente, no hizo falta.
Por otra parte, la noche del domingo al lunes, sobre las 00:00 horas, fue un vehículo que circulaba por Rondalla de Rondalles el que levantó las sospechas. Al pararlo y realizarle la prueba de alcoholemia, ésta dio positivo por dos veces. Además, el vehículo tenía la ITV caducada y el conductor tan solo tenía permiso para conducir ciclomotores.