Ayer jueves, una reunión extraordinaria del Consejo de Ministros dio luz verde al anuncio realizado el pasado viernes por el presidente del Gobierno: las mascarillas dejarán de ser obligatorias al aire libre siempre que se respete la distancia de 1’5 metros. Una decisión que, por una parte, algunos sectores habían demandado, pero que por otra, científicos e incluso algunos responsables políticos autonómicos entendían precipitada, dado que la caída de la incidencia se ha frenado y que la efectividad de las vacunas ante las nuevas variantes, especialmente la procedente de la India (llamada Delta), es sensiblemente inferior a la que las vacunas tienen frente a otras cepas.
Por eso, dado que mañana sábado ya se podría ver las primeras imágenes de ontinyentins por las calles sin mascarillas, a través de www.loclar.es se ha planteado una encuesta para conocer cuál es el sentir de la ciudadanía al respecto de la posibilidad de no utilizar la mascarilla al aire libre.
A pesar de las ganas que todo el mundo tiene de deshacerse de las mascarillas, a tenor de las respuestas, se puede deducir que aún es más el miedo o respeto al virus que las ganas de abandonar las mascarillas, puesto que el 56% de los encuestados ha reconocido que la seguirán utilizando a pesar de que a partir de mañana sábado ya no sea obligatoria. Frente a esto, el 43’9% sí que avanza que no la utilizará y que saldrá a la calle sin mascarilla.