Tras tres años viviendo y luchando por mejorar sus condiciones laborales en el mundo de la publicidad en Madrid, el ontinyentí Juanjo Sayas y su actual mujer tomaron una de las decisiones más importantes de sus vidas. Prepararon sus maletas y atravesaron el Atlántico hacia la capital de México, donde se encuentra el segundo mercado laboral más grande a nivel publicitario.
"Nos encontrábamos estancados, puesto que vivir y crecer profesionalmente en Madrid era muy complicado. Ambos necesitábamos acceder a un mercado laboral mucho más amplio, por lo que decidimos viajar al país de la que es mi actual mujer", comenta Juanjo.
Pese a que los inicios jamás prometen ser fáciles, el talento y la dedicación de la pareja los llevaron a encontrar su sitio. Tras mucho esfuerzo y siete años en el extranjero, actualmente, el ontinyentí trabaja para una multinacional que colabora con el grupo Coca-Cola. "A nivel laboral fue la mejor decisión que pudimos tomar, ya que hemos podido escalar, mejorar y superarnos profesionalmente", asegura el publicista
Una de las principales diferencias que Juanjo ha encontrado entre el mercado laboral mexicano y el español es la dimensión que ambos presentan. Tal y como explica, "El mercado de México es tan grande que la tasa de paro aquí es mucho menor que en España, sobre todo el paro juvenil. Aquí hay mucha más oferta de trabajo. Te abren las puertas sin pensarlo". Esta diferencia se hizo evidente desde el principio: "En un mes en México me aceptaron más entrevistas de trabajo que en seis meses en España", comenta el ontinyentí.
Otro aspecto que destaca es la variedad y amplitud de los salarios en México. "Aquí se paga mucho mejor, al menos en el sector publicitario, que es por donde yo me muevo", asegura. Además, señala que los mexicanos valoran mucho el nivel de estudios europeos, lo que facilita la integración de profesionales extranjeros en el mercado laboral.
A nivel cultural, Juanjo ha encontrado en México un país acogedor y familiar. "Jamás me he sentido fuera de casa. Aquí, la vida es muy familiar, colectiva y abierta. Además, los mexicanos tienen una cultura muy servicial hacia el prójimo", destaca. Sin embargo, también ha observado una gran desigualdad social, con unos niveles socioeconómicos muy marcados que afectan la forma en que las personas se relacionan.
Pese a su éxito y adaptación en México, Juanjo y su esposa tienen planes de regresar a España en un futuro. "El principal problema es la inseguridad que existe en México. En ocasiones nos vemos con la necesidad de vivir en una burbuja, por lo que echamos de menos la libertad de España; salir a la calle sin preocupaciones o que nuestros hijos también puedan disfrutar de una infancia libre y tranquila", confiesa. Sin embargo, a nivel laboral, todavía no se siente plenamente seguro para volver, pero tiene la esperanza de seguir cultivando su carrera en México hasta estar listo para dar el salto definitivo hacia su país natal.
Finalmente, cuando se le pregunta sobre lo que más echa de menos de Ontinyent, Juanjo responde con nostalgia: "Mi familia y mis amigos. Es bonito ver que todo está exactamente igual que cuando lo dejaste, pero lo que más echo de menos es la normalidad de siempre: estar en casa de mi madre, comer sus platos estrella, ir al bar y tomarme un aperitivo con mis amigos… echo de menos lo cotidiano".
Así es como se muestra Juanjo sin filtros, un ontinyentí que encontró en México la oportunidad de crecer profesionalmente, pero que siempre lleva en su corazón las raíces y la cotidianidad de su tierra natal.
