El mes de enero ha sido malo en cuanto a la creación de empleo. Así, según las cifras del Servef, en el mes de enero Ontinyent registró 2.717 personas inscritas como demandantes de empleo, lo que supone 34 más que el mes anterior, un incremento porcentual del 1,27%. Ahora bien, si se compara con el mismo mes del año anterior, hay que tener en cuenta que en enero de 2019 había 2.840 parados, lo que supone que los 2.717 de enero de 2020 son 123 personas menos que hace un año, una variación interanual del -4,33%.
En cuanto a la Vall d’Albaida, el paro registrado en enero de 2020 fue de 5.580 desocupados, es decir, hay 86 parados más que en el mes anterior y 222 menos que en el 2019, lo que supone un incremento mensual de 1’57% y una reducción interanual de 3’83%.
En relación a la contratación, en La Vall d’Albaida se han registrado 2.376 contratos este enero de 2020, lo que ha supuesto 108 contratos menos que en el 2019 (un 4’38% de descenso interanual). Por géneros, 1.003 han sido para mujeres (42’21%) y 1.373 a hombres (57’79%). La contratación indefinida mensual de enero de 2020 ha sido de 249 contratos (10’48%) y la contratación temporal ha sido de 2.127 contratos, lo que significa un 89’52%. Respecto a 2019, la indefinida disminuye en 99 contratos (un 28’45%) y la temporal disminuye en 9 contratos (0’42%). Los contratos a tiempo parcial son un 32’32% con respecto a los de jornada completa, un 67’68%.
Los datos de paro de este mes constatan que las campañas en la agricultura y en el comercio son muy cortas y con ello el empleo que las mismas generan, cada vez es más estacional y por tanto dan trabajo menos días y meses a sus plantillas, explican desde UGT.
Para Raül Roselló, Secretario Intercomarcal de UGT-PV, considera que “tenemos un empleo marcado por las campañas estacionales donde el mes de enero es un mes malo, de baja actividad, pero continúa habiendo un descenso interanual de parados”.
Roselló recuerda que “como ya proponen otros profesionales e instituciones las alternativas pasan por dar continuidad a estas actividades turísticas y agroalimentarias tan importantes en nuestras comarcas. Necesitamos inversiones para que nuestra industria agroalimentaria tenga campañas más largas con productos agrarios de mayor valor añadido, así como que nuestra industria turística tenga los apoyos institucionales y empresariales necesarios para que se mantenga y mejore la importante cantidad de empleo que en la actualidad genera”.