La Unió Llauradora informa que las tormentas acompañadas de granizo del pasado sábado afectaron a más de 8.700 hectáreas de cultivo en la comarca de la Vall d’Albaida, donde los términos municipales más dañados se sitúan en Bèlgida y Ontinyent en los que existen parcelas con el 100% de daños en sus zonas más afectadas.
Varias tormentas ocasionaron el sábado algunas precipitaciones, desde apenas unas gotas hasta los 25 litros/m2, y en algunos casos acompañadas de granizo aunque de forma desigual. Los daños se concentraron en la zona sur-oeste de la comarca, afectando a los municipios de Atzeneta, Agullent, Albaida, Bèlgida, Benissoda, Bufali, Carricola, Otos, El Palomar, La Pobla del Duc y Ontinyent.
La producción agrícola en esos municipios es muy diversa con cultivo de cítricos, caqui, frutales de hueso como melocotón, nectarina y albaricoque, olivar, almendro, algo de vid y un poco de hortaliza. 
La mayor afección se centra en la fruta de hueso, ya que el pedrisco ha impactado de forma muy negativa, por pequeño que fuera el granizo su impacto produce marcas que en estos momentos ya casi a punto de la recolección provocan la podredumbre del fruto y sólo ya con las lluvias ahora provoca el temido cracking o partidura de la piel.
Por lo que se refiere a los cítricos, el pedrisco ha dejado marcas muy pronunciadas en algunos casos que posiblemente ocasionen la caída del fruto y los que no caigan quedarán marcados no siendo ya comerciales. En los almendros, los frutos van a quedar marcados y posiblemente se reduzca su calibre y calidad de los que queden en el árbol. 
En el cultivo del caqui todavía es pronto para analizar los daños, pero ya se observan daños tanto en el fruto como en los brotes que en estos momentos son muy tiernos y pueden afectar a la futura madera del árbol, además de a la producción. Lo mismo ocurre con la vid. Las hortalizas han sufrido bastante puesto que es un producto muy tierno y sensible que en muchos casos está iniciando el crecimiento. En cuanto al olivar, en la zona este año se preveía una buena cosecha apreciándose una gran floración que también se verá afectada por estas tormentas
LA UNIÓ señala que estas adversidades climatológicas están cubiertas por el actual sistema de seguros agrarios y solicitará a Agroseguro que agilice las peritaciones de las parcelas afectadas lo máximo posible. La organización también reclamará para las personas afectadas la concesión de ayudas directas, la condonación del IBI de las parcelas cultivadas y construcciones presentes en ellas, la bonificación de las cuotas de la Seguridad Social durante un año, el establecimiento de préstamos con interés subvencionado y también una serie de actuaciones y ayudas para las cooperativas comercializadoras afectadas.
Por otra parte, las lluvias caídas en otras zonas de la comarca donde no cayó el temido pedrisco, serán beneficiosas para todos los cultivos, excepto para la fruta de hueso que esté cerca de la maduración y a las que este tipo de lluvias tormentosas le provocan el agrietado de la fruta y su inutilización para la venta. 

Superficie localidades afectadas en hectáreas (Fuente LA UNIÓ)                                                                                                                                                                                                        Atzeneta Albaida: 300
Agullent: 670
Albaida: 1.360
Bèlgida: 800
Benissoda: 100
Bufali: 100
Carrícola: 150
Otos: 450
El Palomar: 220
La Pobla del Duc: 1.200
Ontinyent: 3.400
Total: 8.750

AVA cifra los daños en 2 millones de euros
Por su parte, según los cálculos de la Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-ASAJA), la intensa granizada del pasado sábado por la tarde causó dos millones de euros en daños sobre una superficie de unas 2.300 hectáreas de cultivo, principalmente en los términos municipales de Ontinyent, Bèlgida, Albaida, Agullent y Otos.
La primera estampa que dejó el pedrisco fue un manto blanco que cubría las calles y tejados de los pueblos afectados. Sin embargo, durante los días posteriores los agricultores están calibrando el impacto del pedrisco en sus producciones. Los daños llegan a ser del 100%, es decir, a perder el valor comercial de toda la cosecha en campos de frutas de hueso como ciruelas, melocotones y nectarinas, las cuales se encontraban en un estado muy avanzado de maduración. También hay pérdidas graves en otros cultivos que se hallan en fase de brotación, como los caquis, cítricos, viñas y olivar.
La organización agraria solicita a Agroseguro que agilice las peritaciones de las parcelas golpeadas por el granizo con el objetivo de que los agricultores reciban las oportunas indemnizaciones a la mayor brevedad posible. Asimismo, AVA-ASAJA urge a las administraciones ayudas fiscales y directas destinadas a los productores de los términos afectados que no habían contratado aún el seguro por estar abierto el período de contratación que venían realizando todos los años, como es el caso de los cítricos, pero que habían retrasado hasta saber con mayor certeza qué cantidad de producción van a tener esta campaña.