El proyecto de investigación “Dones i Fàbriques”, iniciado en Ontinyent para profundizar en el papel de las mujeres a la industria textil del siglo XX, se ampliará en las próximas semanas en las localidades de Agullent y Bocairent. Se trata de una iniciativa financiada por el Museo Valenciano de Etnología (ETNO), dependiente de la Diputación de València y con el apoyo del Museo del Tèxtil de la Comunidad Valenciana en Ontinyent, su Fundación, el Ayuntamiento de Ontinyent, y el Museo de la Palabra (el Archivo de la Memoria Oral Valenciana), que busca testigos en primera persona para profundizar en el papel de las mujeres en la industria textil del siglo pasado.
Recopilan la memoria oral
Desde el pasado mes de marzo, las investigadoras Marta Berlanga y Sara Sierra vienen recopilando testigos de memoria oral de aquellas mujeres que formaron parte del escenario industrial textil. Marta Berlanga explicaba que “hemos llevado a cabo talleres participativos en los que han participado más de medio centenar de mujeres, que han sido muy emotivos, porque además de aportar fotografías y testigos, muchas de ellas se han reencontrado después de mucho tiempo para compartir recuerdos”.
Además de Ontinyent la industria textil en la Vall d'Albaida también tuvo un papel protagonista en otras localidades, y esto ha motivado que grupos de personas otros municipios hayan mostrado su interés para participar del proyecto. En este sentido, Sara Sierra explicaba que “durante las próximas semanas vamos a ampliar la investigación en los municipios de Agullent y Bocairent, aunque podemos atender peticiones de mujeres de Ontinyent que no hayan participado de los talleres que hemos hecho, o incluso otras localidades”. Después de estos talleres de intercambio de vivencias, se llevará a cabo una fase de entrevistas personalizadas, digitalizadas y grabadas en formato audiovisual.
El presidente de la Fundación Museo del Tèxtil de la Comunidad Valenciana, Jorge Rodríguez, destacaba el interés de una iniciativa “que da voz y visualiza a mujeres que tuvieron un papel clave en nuestra historia, el mismo tiempo que humaniza el Museo del Textil y lo convierte en ese espacio vivo y dinámico que queremos que sea”.