El PSOE de Ontinyent emitía una nota de prensa este martes en la que criticaba "el desmantelamiento" de los puntos de recarga de coches eléctricos, a lo que añadía "dejadez y mala planificación". Concretamente, son los cargadores situados en Paduana, el Regall y el polígono l'Altet. 
El portavoz socialista, José Antonio Martínez, lamentaba que "ningún vecino ni visitante puede cargar su coche en uno de estos aparcamientos, a pesar de la importante inversión realizada", en referencia a la subvención del IVACE para instalar estos puntos de recarga, con un coste de 16.000 euros por unidad.
Por su parte, desde el equipo de gobierno explican que estos tres puntos "estuvieron operativos varios años, durante los que ofrecieron un servicio de recarga gratuito en un momento en el que el parque de coches eléctricos era reducido y se quería fomentar su uso. Actualmente, este contexto ha cambiado, porque hay más puntos privados y un mayor número de usuarios, por lo que ya no corresponde mantener un servicio gratuito".
Las mismas fuentes explican que los antiguos puntos se retiraron y el consistorio tiene en marcha el proceso de licitación para la instalación y gestión de nuevos puntos de recarga, que ofrecerán el servicio de manera regulada y de pago, como ocurre en la mayoría de ciudades".