El Ayuntamiento de Ontinyent ha iniciado las gestiones que harán posible la demolición de las casas del tramo final de la avenida Generalitat de Ontinyent, que presentan un estado deficiente de conservación. Esta decisión llega después e las inspecciones realizadas por técnicos municipales, que han determinado la existencia de problemas de seguridad por el deterioro de las estructuras así como la posible generación de un problema de salubridad por la suciedad interior y la basura acumulada en los patios.
La situación se resolverá al confirmar la empresa propietaria de la unidad de ejecución Almaig 1A, en la que se encuentran estas viviendas, situadas junto a la zona de Benarrai, que atenderá el requerimiento que le había hecho el consistorio. El concejal de Urbanismo, Jaime Peris, explica que el agente urbanizador, propietario de estas viviendas ubicadas en los números 29, 31, 33, 35 y 37 de esta vía, nos ha confirmado que en las próximas semanas presentará un proyecto de demolición que se hará efectivo a principios de año”.
Estas casas están, dentro del actual PGOU, en situación fuera de ordenación, ya que ocupan terreno destinado a la vía pública. El informe evidencia el estado muy deficiente de las casas, que fueron violentadas hace tiempo y cuyo interior han sido destrozado. Una de ellas sufrió un incendio y quedó totalmente dañada. En general, muestran signos de padecer un proceso acelerado de degradación.
Con su demolición, además de evitar el peligro, se dará cumplimiento al PGOU y se conseguirá que el nuevo acceso a la ciudad por la avenida Conde Torrefiel presente un aspecto más limpio y amable, destacaba Jaime Peris.