Jueces y fiscales de todo el país han iniciado este lunes una huelga de tres días convocada por cinco de las principales asociaciones de la carrera judicial y fiscal: la Asociación Profesional de la Magistratura (APM), la Asociación Judicial Francisco de Vitoria (AJFV), el Foro Judicial Independiente (FJI), la Asociación de Fiscales (AF) y la Asociación Profesional e Independiente de Fiscales (APIF).

El motivo, según han declarado las asociaciones, es la defensa de la independencia de la Justicia, que consideran gravemente amenazada por la reforma del sistema de acceso a la carrera judicial y del estatuto del Ministerio Fiscal que plantea el Gobierno.

En las primeras horas de esta jornada reivindicativa, el seguimiento ha sido desigual en los diferentes territorios. En el caso de Ontinyent, de los cuatro juzgados existentes, tres están actualmente ocupados por jueces sustitutos, quienes resultarían más beneficiados tras la reforma del acceso a la carrera. El cuarto juez, funcionario de carrera, tampoco se ha adherido al paro.

"La reforma propuesta abre la puerta a un control político del Ministerio Fiscal y reduce la transparencia en el acceso a la carrera judicial", han advertido en un comunicado conjunto los convocantes.

Desde el Gobierno, por su parte, se ha llamado a la calma y al diálogo y han reiterado su compromiso con el respeto a la separación de poderes, aunque mantienen su intención de sacar adelante la reforma.