El Ayuntamiento de Ontinyent ha iniciado la adaptación de dos viviendas municipales para dar acogida a mujeres víctimas de violencia de género, a las que, además, se prestará atención psicológica y de acompañamiento. Las concejales de Ciudadanía (Virtudes González) e Igualdad (Natàlia Enguix) daban detalles de la que fue una de las propuestas más votadas a la última edición del proceso "Ontinyent Participa”, presentada por Ana Piera, una de las integrantes del Consell de las Dones.
Virtudes González recordaba que la última edición de “Ontinyent Participa” registró algunos cambios, entre los que destacó que "un mínimo del 50% de las propuestas ganadoras tenían que estar destinadas a causas o acciones de carácter social, medioambiental o igualitario; así como el desarrollo de talleres participativos". 
Natàlia Enguix explicaba que la adaptación de las dos viviendas servirá para aumentar las recursos contra la violencia de género “y supone un proyecto pionero en la Comunidad Valenciana y quizás en todo el Estado en ciudades del tamaño de Ontinyent, puesto que ningún municipio valenciano de estas características cuenta con un recurso municipal como este, donde no solo ofreceremos vivienda sino también atención integral por parte de los profesionales de las varias áreas implicadas”.

Proyecto ya aprobado y con un coste de 37.332
El proyecto, que tiene un coste global de 37.332 euros, fue aprobado la semana pasada por la Junta de Gobierno Local, y las reformas a las viviendas empezarán en breve. Además, se está trabajando en un reglamento que regule el funcionamiento de la casa de acogida, donde podrán residir mujeres de riesgo bajo o no apreciado. El reglamento, elaborado por personal técnico, jurídico, de servicios social y de igualdad, estará dirigido tanto al personal técnico que atenderá a las mujeres como las propias usuarias, que dispondrán de un programa de atención individualizada para cada caso, previo análisis de una comisión.
Las dos viviendas están juntas y en un principio, se destinará a una unidad familiar por vivienda, aunque no se descarta, explicaba Natalia Enguix, que si es necesario y la comisión técnica lo estima oportuno, en una misma vivienda puedan convivir varias mujeres con sus familias.
La intención es que una vez empiecen las obras, la duración de las mismas se prolongue un par de meses.
La edil de Igualdad incidía en la importancia de la implicación de las administraciones públicas en la lucha contra la violencia machista, que a nivel mundial supone la principal causa de muerte de mujeres de entre 15 y 44 años, y que contabiliza más de 1.000 mujeres asesinadas en España desde 2003.