“Un ejemplo de apuesta para dar protagonismo a los peatones, con un urbanismo con el que queremos dar hacer la ciudad más accesible, más eficiente, más sostenible y más habitable”. Así definía el alcalde de Ontinyent, Jorge Rodríguez, las obras de remodelación de la calle Padre Fullana de la localidad, una actuación ejecutada dentro del Plan de Eficiencia Urbana 2020/2021 del Gobierno ontinyentí, que ha supuesto una inversión de 575.268 euros y que ya ha finalizado.
Jorge Rodríguez visitaba la finalización de las obras acompañado de los ediles de Territorio y Servicios Municipales, Joan Sanchis i Manuel Cuesta; el Director General de la empresa Aguas de Valencia, David Fajardo; así como la presidenta de la Asociación Vecinal del barrio, Maria Modesta Pastor, y miembros de la junta de esta entidad. Una actuación ejecutada en una calle donde se ha duplicado el espacio peatonal (de los 630m2 anteriores además de 1.400 m²), modernizado y mejorado la eficiencia de la red de agua potable e instalado nuevo mobiliario urbano, además de crearse una nueva plazoleta en la intersección de las calles Padre Fullana, Carlos Díaz y Juan XXIII.
El concejal de Territorio, Joan Sanchis, destacaba la rapidez y efectividad en la realización de las obras de Padre Fullana, ya que el plazo de ejecución de 6 meses se ha reducido en más de 1 mes. En la intervención también se ha ampliado una de las aceras en la calle Carlos Díaz; reurbanizado la calle Santo Pablo; adecuado los pasos de peatones; y renovado el pavimento asfáltico y la red de agua potable municipal, tanto en la calle Padre Fullana como en el tramo de Carlos Díaz. Concretamente, se ha sustituido los conductos de fibrocemento existentes desde hace más de 40 años por nuevas cañerías de fundición.
La presidenta de la Asociación Vecinal, María Modesta Pastor, recordaba que la actuación era una reivindicación del colectivo vecinal, que está "muy satisfecho con el resultado porque además de atender las reivindicaciones de hacer las aceras más anchas, eliminar barreras arquitectónicas y renovar las cañerías de agua, se ha creado una nueva plazoleta en el enlace de tres calles”, señalaba.
El alcalde avanzaba que la próxima semana empezarán unas obras parecidas en la calle Salvador Tormo del barrio de Sant Josep, en el tramo entre las calles Pintor Segrelles y Avenida de Albaida, en este caso con un presupuesto de 262.251 euros. “Es un modelo que apuesta por calles que sean disfrutadas por las personas, en vías donde incluso había dificultades para transitar con silla de ruedas o carros de bebés”, destacaba. Las obras a Salvador Tormo, que se iniciarán el próximo lunes, se ejecutarán durante un plazo previsto de 4 meses y entre las actuaciones que se realizarán se ampliará las aceras, se renovará la red de agua potable, se dotará la zona de nuevo mobiliario urbano y se adaptará el conjunto a la nueva normativa de accesibilidad.