El Ayuntamiento de Ontinyent acaba de conceder esta tarde a Esteban Morcillo el título de hijo adoptivo que el pleno de la ciudad aprobó otorgarle el pasado mas de noviembre. Con este acto, que ha tenido lugar en la Sala Gomis, se ha reconocido el trabajo de Morcillo por la ciudad (de gran importancia para el desarrollo del Campus Universitario de Ontinyent). Han asistido representantes políticos, de la comunidad universitaria y de asociaciones locales que han apoyado a la propuesta.
El título de hijo adoptivo es un reconocimiento que llega después de que el alcalde avanzara durante la inauguración del curso académico 2017/2018 y en presencia del entonces rector que propondría la concesión de este título para el Dr. Morcillo. Finalmente, la propuesta fue aprobada en pleno el noviembre del año pasado.
Durante el periodo de Morcillo al rectorado de la Universitat de València, ésta invirtió 3 millones de euros en el nuevo edificio del Campus, a los que se añadían posteriormente otros 1'5 millones para la adecuación del sótano y la rehabilitación de las fachadas del antiguo Lluís Vives. Además, se pusieron en marcha Unisocietat, la Universidad de Otoño o la Cátedra Conjunta de las universidades de Valencia y Alicante.
Con la concesión del título, se refuerza el vínculo del Dr. Morcillo con Ontinyent después de que en 2004, se le otorgara la Medalla de Oro de la ciudad a la Universitat de València-Estudi General.
El hijo adoptivo n.º9 de la ciudad
El nombramiento de Esteban Morcillo es el nº9 de la historia de la ciudad, como lo fueron a 1883 Ángel Calderón y Luis Pedro Jorques; el cardenal Juan Benlloch (1928); Juan Comes Doménech (plebán de Santa María en los años 50); el padre Eusebio Arbona; el párroco de San Rafael, Lluís Espí; el doctor José Riera Roig (2003); y a título póstumo Joaquín José Cervino Ferrero (2017).
