El pleno del Ayuntamiento de Ontinyent aprobará mañana jueves la solicitud de declaración formal de zona “gravemente afectada por una emergencia de protección civil”, lo que se conoce como declaración de zona catas trófica.
La propuesta, que será remitida al Gobierno central, será presentada por el alcalde, quien destaca que “sin la repuesta profesional y coordinada que ha habido por parte de los ayuntamientos, las fuerzas de seguridad y de emergencias, las consecuencias del temporal hubieran sido peores. Hemos restablecido los servicios y comunicaciones, pero la parte más grave de los destrozos en infraestructuras y servicios también necesita una respuesta ejemplar de las administraciones públicas”. De ahí que el primer edil recuerde que “vamos a exigir a los diferentes departamentos de las administraciones superiores (Gobierno, Generalitat y Diputación) el mismo grado de eficacia, rapidez y humanidad en la aprobación y el reparto de las ayudas que han demostrado los servicios de emergencia”.
En la propuesta de declaración de zona catastrófica se expone la situación generada por el temporal, especialmente el día 12 de septiembre, cuando la crecida del río obligó actuar ante le peligro inminente para las personas y los bienes. Recuerda la solicitud que aunque estaba previsto un operativo porque se esperaban lluvias intensas, la intensidad de la precipitación fue extraordinaria, lo que obligó a evacuar a 44 personas por el Tirador. 
En la solicitud consta toda el área geográfica de Ontinyent como afectada (casco urbano y diseminado) pero destaca especialmente la incidencia de la riada en la Canterería.
Los informes técnicos adjuntos a la solicitud de zona catastrófica destacan que “la situación actual aún es muy grave, con lugares inundados, casas caídas, barrancos deteriorados totalmente, zonas agrícolas y ganaderas inundadas, cosechas perdidas, animales muertos y vías impracticables, un episodio agónico y desesperante en el que la actuación de emergencia de los Bomberos y la colaboración de las fuerzas de seguridad evitó la pérdida de vidas humanas”.
Por la magnitud de la situación, entiende la solicitud que es posible la intervención del Estado previa la declaración expresa del gobierno de España de zona gravemente afectada por una emergencia de protección civil, ya que, según la propuesta, “el siniestro ha perturbado gravemente las condiciones de vida de la población, con la producción de unos daños muy considerables, tanto desde el punto de vista cuantitativo como cualitativo, con personas que han visto cómo sus casas han quedado completamente inhabitables, a lo que hay que sumar los destrozos en bienes tanto de titularidad municipal como privada”.