El alcalde de Ontinyent, Jorge Rodríguez, participaba este miércoles en la segunda jornada del Congreso Internacional “Memoria y Democracia”, organizado por la Diputación de València, un encuentro que ha servido para conmemorar los 10 años de la creación de la Delegación de Memoria Democrática, impulsada precisamente durante la presidencia del mismo Rodríguez al frente de la institución provincial. El congreso, que se ha desarrollado en el Centro Cultural La Beneficencia, ha contado con la participación de expertos, y representantes de diferentes administraciones, entre ellos la vicepresidenta primera de la Diputación, Natàlia Enguix; la primera diputada provincial de Memoria Democrática, Rosa Pérez-Garijo, y el vicepresidente segundo de la Diputación de Cádiz, Francisco Javier Vidal.
Durante su intervención en la mesa redonda “10 años haciendo memoria”, Jorge Rodríguez ha expresado su “orgullo” por haber impulsado, como presidente de la Diputación, una delegación pionera entre las instituciones valencianas. Rodríguez ha destacado la importancia de dar continuidad a esta tarea, “un trabajo costoso y largo en el tiempo, pero necesaria para romper con décadas de olvido impuesto”. En este sentido, ha subrayado que “enterrar dignamente a las personas represaliadas y recuperar su memoria no es una cuestión ideológica, sino un acto de justicia básico en cualquier sociedad democrática”.

Durante el debate, Rodríguez ha incidido en la necesidad de reforzar la educación como herramienta fundamental para mantener viva la memoria y los valores democráticos. “Quienes nacimos después de la dictadura no recibimos en las aulas una formación suficiente sobre el que significó el franquismo y sus consecuencias. Sin conocer esa parte de nuestra historia es difícil entender la importancia de la democracia y los derechos humanos”, ha lamentado. En relación con el contexto actual, ha señalado que “la memoria no tiene que ser un campo de batalla partidista, sino un trabajo común. Se trata de derechos humanos, de mínimos democráticos. Recuperar a las personas desaparecidas o dignificar las víctimas no puede depender de colores políticos, sino de principios de justicia y humanidad”.
Rodríguez ha recordado también el papel clave de la colaboración entre administraciones, especialmente con los ayuntamientos, a través de las líneas de financiación creadas por la Diputación. Finalmente, Jorge Rodríguez ha querido agradecer a la Diputación y a su vicepresidenta primera, Natàlia Enguix, la continuidad del trabajo iniciado hace una década y su compromiso con la memoria democrática. “Es fundamental que esta tarea no se pare, especialmente ahora que el tiempo juega en contra y cada vez queden menos testigos vivos. El mejor homenaje que podemos hacer a las víctimas es mantener viva su memoria y garantizar que nuestra sociedad no olvide nunca el valor de la libertad y la justicia”, concluía.
La vicepresidenta 1ª y diputada de Memoria Democrática, Natàlia Enguix, responsable de la organización del congreso, destacaba que “los jóvenes nos han dado en este congreso una lección de esperanza por un futuro con una sociedad más justa, igualitaria y de consenso”. En este sentido, destacaba la importancia de involucrar a los jóvenes con la memoria democrática, “para que conozcan lo que pasó en este país y no se vuelva a cometer las violaciones de derechos humanos que pasaron. Es parte del trabajo que estamos haciendo en esta legislatura el trabajar con la gente joven, para difundir lo que es la Memoria Democrática, para vincular la memoria democrática a los derechos humanos y a la democracia, y precisamente por eso también el nombre de este congreso es Memoria Democrática”.