- ¿Cómo le comunican que habían pensado en Ud. para el cargo de Camarera Mayor?
- Me llamó don Antonio por teléfono para decirme que querían hablar conmigo, algo que me sorprendió, aunque viendo las fechas, lo intuí. Me citaron ese mismo día por la tarde y me lo propusieron. Yo era consciente de que esto conlleva mucho trabajo, pero me dijeron que todo tiene solución, y la verdad es que no me costó mucho decidirme.
- ¿Dijo que sí enseguida?
- Siempre había pensado que algún día sería Camarera, aunque Camarera Mayor jamás en la vida, lo veía con mucha responsabilidad, pero gracias a Dios he sido capaz. Dije que sí porque para mí esto es una acción de gracias. La Virgen es muy importante para nosotros y tenía que decir que sí, por muchas razones. Es nuestra patrona, y tenemos que estar ahí. La Virgen ha hecho un milagro muy grande en mi familia, y este es un momento de dar gracias.
- ¿De dónde le viene su vinculación a la parroquia y a la Virgen?
- Mi abuela y mi tía-abuela me llevaban a la Iglesia de pequeña. En la parroquia mi vinculación fue desde la infancia, cuando haces la catequesis, te haces junior, te confirmas, haces juveniles, y luego volví a entrar y estuve en el grupo de jóvenes de la parroquia.
- ¿Se siente arropada por su familia?
- Ellos tenían mucha ilusión. Cuando dije que sí, mis hijos me dijeron que ya lo sabían. Sin el apoyo de casa, esto es inviable, porque son muchas horas y mucha dedicación.
- ¿Cómo es su relación con el resto de Camareras?
- La verdad a algunas las conocía de vista, pero a otras no las había visto en mi vida, y la verdad es que ha sido súper enriquecedor. Será un tópico, pero para mí es una realidad. No las conocía y hoy en día nos miramos y sabemos cada una lo que necesita. Se ha creado un vínculo muy especial y muy bonito. La Virgen nos ha unido de una manera muy especial. Yo las quiero un montón y todas nos queremos mucho. Además, los maridos se llevan también fenomenal.
- ¿Qué significa para Ud. el cargo?
- Una responsabilidad. Y que este año lo enfoco como una acción de gracias. Todo lo que venga lo doy por bien aprovechado y lo entrego. Para mí es servicio y entrega.
- De los actos que ha vivido, ¿con cuál se queda?
- El día en que bajaron a la Virgen, es un momento muy íntimo. Los traslados también fueron muy bonitos e intensos. Pero si me tengo que quedar con un acto, ese es la bajada de la Virgen. Fue muy bonito.
- Y de los actos que están por venir, ¿cuál espera con más ganas?
- Con la Ofrenda y la Procesión. Creo que la Ofrenda es el día de darlo todo y llevar las flores a la Virgen y darle las gracias. Luego la Procesión es acompañar la imagen de la Virgen y que todo el pueblo pueda disfrutarlo.
- ¿Qué significa para Ud. la Virgen?
- Para mí la Virgen es todo. Es el puntal. Leí una vez que la Virgen es la mejor carta escrita por Dios, y es verdad. Para mí es el inicio, el espejo donde nos tenemos que mirar y es la Madre. Es el servicio, la entrega, es quien albergó a Jesús.
- ¿Qué diría para concluir?
- Que, si no estás dentro, no puedes saber cómo se vive la fiesta en primera persona. Es una pena que las mujeres de Ontinyent no echemos esto adelante. Está claro que el entorno social es diferente, algo que creo que se está trabajando. Animo a que la gente lo viva, a que no tengamos miedo, porque todo se puede adaptar. Hay solución para todo. Quiero que la gente lo viva y lo disfrute. Que no veamos el ser Camareras como algo anticuado. Cualquier persona a cualquier edad lo puede vivir. Así que animo a las mujeres a vivirlo y disfrutarlo.