La hostelería de Ontinyent empezará, a partir
de mañana lunes 11 de mayo, a reabrir sus puertas tras casi 8 semanas de
cierre por la crisis sanitaria del COVID-19. Esta reapertura, no obstante, no
será de golpe, sino que será “paulatinamente y con todas las precauciones”, así
lo aseguran desde el sector.
L’Associació d’Hostalers de la Vall d’Albaida
(AHVAL) ha realizado una valoración y una puesta en común de cómo va
organizarse la “vuelta a la normalidad”. En este sentido explican que en la
fase 1, que se iniciará a partir del próximo lunes, abrirá en torno a un 25% de
los locales de la ciudad. En la fase 2, está previsto que se reincorpore un
50%, y el resto volverá a la actividad en la fase 3 y posteriores.
En esta fase 1 se permitirá sólo el servicio
en terraza con cita previa, y de momento no se podrá atender en el interior de
los locales. A esta restricción se incluye que en las terrazas debe haber una
separación determinada entre las mesas y sillas, de unos dos metros y, en caso
de no poderse, debe haber un parabán. En cada mesa pueden haber como máximo 10
comensales.
Mantener las distancias puede suponer más o
menos viable para los establecimientos que tengan las terrazas en amplias
zonas, como la plaza de la Concepción, la plaza Santo Domingo o el parque
Vicent Andrés Estellés. No obstante, son muchos los locales que no disponen del
espacio suficiente como para salvaguardar las medidas de seguridad. Éstos han
preferido esperar a las siguientes fases para reabrir. Es el caso de bares como
el Nou Tíbot, en el barrio de San Rafael, o el bar Chuymar, quien destaca que
tiene primero que analizar la situación y que por ello, de momento no abre sus
puertas. También es el caso de Festeros y Casa Seguí, que esperarán a abrir
cuando se permita el servicio en comedor.
Otros establecimientos sí que abrirán sus puertas a partir de mañana, como es el caso de Tapateix, el bar San Vicent o el bar Atenea. En este sentido desde AHVAL remarcan que no todos abrirán el día 11, sino que será a lo largo de la semana cuando vayan reabriendo poco a poco. Así por ejemplo, el Jauja y el Roma, abrirán a partir del día 14.
Además de la correspondiente desinfección de
los establecimientos esta reapertura supondrá el cambio en muchos hábitos. El
personal irá adecuadamente vestido con mascarillas o pantallas de protección.
Se dispondrán zonas de hidroalcohol para clientes y personal; cambia el
concepto de aceiteros, servilleteros, etc., que pasarán a ser individuales;
cambiará también el concepto de la carta, para la cual se estudian nuevos
mecanismos electrónicos y otros sistemas para evitar el contacto con las manos;
los aseos deben limpiarse varias veces al día; se deberá higienizar el mobiliario
cada vez que sea utilizado por los clientes. Así por ejemplo, desde el bar
Atenea explican que van a adquirir un spray destructivo de bacterias que
limpia las mesas y sillas cada vez que se levante el cliente, y que han
procedido a desinfectar la cocina con una máquina especializada.
Estas son algunas de las medidas que se van a
tomar en los locales. Desde AHVAL se muestran decididos a volver a empezar, a
retomar poco a poco la normalidad después de más de 50 días con ingresos cero.
Su objetivo es adoptar todas las medidas necesarias para proteger a sus
clientes y que se sientan seguros en sus instalaciones. En lo referido a las
plantillas, prevén ir recuperando el personal de manera gradual y en base a las
necesidades. Lamentan que no puedan volver a absorber a la totalidad de la
plantilla, pero aseguran que no pueden hacer frente a las nóminas como antes si
el mercado no se reactiva.