La Casa del Delme acogió una reunión entre los concejales de Seguridad, Pablo Úbeda, y Sostenibilidad, Sayo Gandía, con vecindario de la calle Mayor de Ontinyent para debatir el futuro de la calle Mayor, declara Zona de Acceso Prioritario Residencial. Tras la prórroga de dos meses, el lunes empezaba la aplicación de esta nueva realidad para la calle Mayor. Agentes de la Policía Local estuvieron informando a vecindario y a conductores que circulaban por esta vía, pero aún no impusieron
multas.
Por la tarde, se celebró una reunión multitudinaria en la que el concejal Pablo Úbeda contestó a las peticiones que un grupo de personas había hecho llegar al consistorio junto a un millar de firmas. Respecto al punto que pedía que la calle Mayor tenga un único sentido de circulación, Úbeda comentaba que se aceptaba. En cuanto a la propuesta de aplicar asfalto impreso en la calle, el edil explicaba que al tratarse de una zona BIC, desde la Oficina Técnica no se aprobaba el cambio de adoquín a asfalto impreso, aunque reconocía que cuando décadas atrás se realizó la reforma de la calle Mayor se colocó un adoquín no apropiado para el volumen de tráfico que la calle ha tenido todos estos años, lo que ha derivado en el mal estado de la calle.
Uno de los puntos que levantó también debate fue el control de velocidad. Úbeda y Gandía explicaban que las cámaras instaladas están preparadas para identificar a los coches que pasan por la calle Mayo y también para medir la velocidad y sancionar, pero que cuando empiecen a aplicarse la Zona de Acceso Prioritario Residencial, incluso los vehículos de los residentes podrían ser multados en caso de exceso de velocidad.
En cuanto a la creación de puntos de carga y descarga a lo largo de la calle Mayor, el edil lo vio factible, a la espera del informe técnico que establezca cuáles son los puntos adecuados para situarlos. Ahora bien, recordaba que si se establecen estos puntos, será obligatorio el hacer uso de ellos y ya no se podrá parar en cualquier otro punto.
En el turno de palabra, fueron algunos los vecinos que mostraron su rechazo a la Zona de Acceso Prioritario Residencial y pedían que la calle Mayor sea una calle de libre circulación. Tanto Pablo Úbeda como Sayo Gandía explicaban que esta medida pretendía pacificar el tráfico y especialmente acabar con el "tráfico oportunista" que usa la calle Mayor como atajo para cruzar la ciudad. Todo ello, explicaban, "redundará en una mejora de la calidad de vida".
Otra petición que se formuló es que el vecindario de Trinquet de Gomis y de la calle Mayor pueda registrarse para poder circular por la calle Mayor, dado que es la vía de acceso a sus viviendas y cocheras. Una petición que los representantes del consistorio respondieron que estudiarían.