La San Silvestre 2019 de Ontinyent batió ayer lunes el récord de venta de dorsales, dado que faltó muy poco para los 3.000 vendidos. Un año más, minutos antes de las 20:00 horas, la plaza del Ayuntamiento se llenó de personas que disfrazadas, en familia o en grupo de amigos, se dispusieron a participar en una prueba no competitiva y de carácter solidario.
Los casi 3.000 euros recaudados (el dorsal tenía un precio simbólico de 1 euro) serán este año destinados a la Asociación Parkinson Benicadell.
No faltaron los tradicionales disfraces relacionados con Navidad, pero también hubo otros relacionados con personajes de la gran pantalla y también participantes vestidos con el uniforme o la ropa de juego de sus equipos deportivos. Como es también habitual, en la parte final de la prueba participaron personas que iban acompañadas por sus mascotas.