El Ontinyent 1931 tenía una cita importante para consolidar el segundo puesto de la clasificación y para romper la mala racha, que le había llevado a acumular dos derrotas en liga y la eliminación de Copa. El rival que visitaba el Clariano era el Tavernes, que antes de la jornada era quinto clasificado.
El partido empezó mal para el equipo de Roberto Bas, que encajó un gol en el minuto 4, cuando Joan Talens aprovechaba un balón rechazado tras un saque de banda para superar por alto a Popov.
A pesar del marcador en contra, tan solo tres minutos después Alexandru envió un balón al travesaño. Misma suerte, es decir, la madera, encontró un remate de Matías Aquino. Con el 0-1 se llegó al descanso, a pesar del dominio y ocasiones locales.
En la segunda parte, un robo protagonizado por Joan Talens se convertía en el 0-2. Era el minuto 53 y el partido se ponía más complicado para los locales. Al igual que en la primera parte, tras el gol visitante, pronto pudo marcar el Ontinyent 1931, pero de nuevo la madera lo impidió, en este caso, al repeler un disparo de Peiró tras aprovechar un rechace a un remate de Aquino. En el 60, un penalti sobre Peiró fue aprovechado por Aquino para reducir distancias en el marcador. Quedaban 30 minutos por delante, pero el juego tuvo muchas interrupciones y tarjetas, sin que los locales pudieran tener buenas oportunidades para al menos empatar. Ya con el equipo totalmente volcado en conseguir al menos un punto, en el 92 llegaba el definitivo 1-3, al transformar Seral un penalti cometido ya en tiempos de descuento.
A pesar de la mala racha, el Ontinyent 1931 conserva la segunda posición de la clasificación, eso sí, con solo cuatro puntos de ventaja sobre La Nucía B.
El próximo partido será la visita al Denia, desplazamiento para el que el equipo contará con el apoyo de la afición, que está preparando un viaje en autobús.