Historias de superación, logros personales, etc., son esas que nos gusta leer, saber que hay cosas que con esfuerzo y sacrificio nos pueden cambiar la vida. La ontinyentina Julia Ferrando García, que este 2021 cumplirá 43 años,  ha conseguido el Premio Extraordinario de Grado al rendimiento académico de la Universidad de Valencia.
Julia acabó de estudiar en el año 1998 y desde entonces estuvo trabajando hasta que le entraron las ganas de volver a estudiar. La ontinyentina entró en el Campus de Ontinyent, ya que le permitía mayor flexibilidad horaria para además de estudiar una carrera, cuidar a sus 3 hijos de 8, 10 y 12 años y sacarse el B2 y el C1 de inglés. La propia Julia Ferrando cuenta a Loclar cómo ha vivido esta etapa y cómo ha logrado un premio otorgado hace un par de semanas tras terminar el grado en el curso 2019/20 y conseguir 18 matrículas de honor y una media de 9.46.
- ¿Cómo decide iniciar una carrera universitaria?
- Cuando se supone que debía haber estado estudiando la carrera universitaria decidí hacer un FP2 en el Jaume I, un equivalente a lo que ahora sería un módulo superior. Una vez finalizado estuve trabajando muchos años y siempre decía ‘ya veremos cuando empiezo a estudiar’. Tras pasar la crisis de 2009, a pesar de que la empresa en la que trabajaba la superó, yo vi que necesitaba un cambio de aires, sobre todo por haber tenido a mis hijos, y entre las opciones que se me abrieron vi la de estudiar en el campus de Ontinyent y estudiar ADE (Administración y Dirección de Empresas). Fue divertido empezar a estudiar después de un parón de tantos años, pero me fue bien, no sé cómo, pero conseguí sacarme la carrera (risas).
-¿Qué notas le han supuesto este premio?
- La nota media con la que he aprobado la carrera es con un 9.46. Además, tengo 18 matrículas de honor durante la carrera. La que más ilusión me hizo fue la del Trabajo de Fin de Grado (TFG), un trabajo que tuve que hacer a final del pasado curso, ya con la pandemia golpeando y aislados en los domicilios. Eso hizo que fuera más complicado, ya que no tenía acceso a bases de datos ni entrevistas, por lo que me costó más. Al final, esa matrícula fue por el gran apoyo de mi tutor.
- Con esa media y esas notas… ¿Se le dio mal alguna asignatura?
- Las notas más bajas son algunos 7 y algo en las asignaturas más teóricas. Digamos que las asignaturas numéricas se me dieron muy bien (matemáticas, estadística, inferencia), pero las que eran más de desarrollo se me dieron un poco peor, pero no me puedo quejar (risas).

- ¿Cómo supo que le concedían el Premio Extraordinario?
- Recibí un correo desde el decanato de la universidad, un correo que me parecía un virus informático, ya que decía “le ha sido concedido el premio extraordinario”, y con todos los avisos que nos mandan debido al teletrabajo sobre los virus, no sabía si fiarme porque me pareció sospechoso, aunque sabía que mis notas eran altas, pero siempre piensas que habrá alguien mejor.
Llamé por teléfono al Campus de Ontinyent y me comentaron que era muy posible debido a mi expediente y me facilitaron el teléfono del Secretario del Decano de la Universidad de Valencia. Cuando le llamé me dijo que sí que lo mirara, que estaba en mi expediente y que aparecería en el título, ya que es una mención que se incluye. Así fue como me enteré.
- ¿Por qué el campus de Ontinyent?
- El tener el campus en la ciudad permite tener una mayor flexibilidad horaria que si tuviera que ir a Valencia ya que tengo 3 hijos de 8, 10 y 12 años. Los servicios que hay aquí en Ontinyent son más o menos los mismos que en Valencia, yo por ejemplo me he sacado también el B2 y el C1 gracias al convenio del campus con la Escuela de Adultos de San Carlos.
También valoré la opción de la UNED, pero a pesar de tener sede en Ontinyent era un poco más complicado.
- ¿Cómo se recuperan los hábitos de estudio tras 20 años sin estudiar?
- El primero de los pasos para recuperarlos es estudiar con ilusión. Yo empecé a estudiar con muchas ganas, aunque mi primer pensamiento fue que quién me mandaba a mí meterme ahí. Mis compañeros son de una generación más joven y yo me veía ahí y no sabía bien qué hacía. Al final, me aportaron mucho por ver las cosas desde otros puntos de vista.
Otro de los motivos fue el gran apoyo que me dio mi familia y tener el objetivo común de sacarlo bien. Tenemos la gran suerte de que hoy en día hay mucha información en internet, por lo que pude refrescar la memoria de todo lo que había dado. Al final cuanto más trabajas, mejor se te da.
- ¿Cómo se compagina estudiar una carrera con 3 hijos en casa?
- Como mis hijos tienen 8, 10 y 12 años, aprovechaba mis buenas notas para ‘picarles’ y así darles ganas de sacar buenas notas que se parezcan a las de su madre. Es muy gratificante también el hecho de poder servir de ejemplo a mis hijos, ya que al haber empezado tan tarde ellos me han visto estudiar.
- ¿Y ahora qué?
- He encontrado un trabajo en una consultoría de proyectos de I+D que sin titulación hubiera sido imposible, por lo que ya es una mejora en mi carrera. A partir de ahora no descarto seguir estudiando si en el campus de Ontinyent me ponen un máster que me guste y que me pueda complementar.