Álvaro Soriano: "A pesar del tiempo, en Irlanda hay mucha calidad de vida" (Ontinyentins pel món) - loclar

- Realicé el grado de Ingeniería de Obras Públicas en la Universidad Politécnica de Valencia y después, un máster de Ingeniería de Canales, Caminos y Puertos. Cuando finalicé me fui con mi hermano a Francia a estudiar francés durante el verano. A continuación, me surgieron unas prácticas de trabajo en Irlanda, y es cuando decidí marcharme allí. Cuando acabé, el jefe me propuso quedarme. Yo no me lo había planteado, pero, como no tenía nada en España, me quedé. 

- Aquí son muy famosas las empresas ganaderas, y era un consulting de ingeniería donde hacíamos 'planning applications' para los granjeros y diseñábamos las naves industriales para los animales. Trabajaba en un pueblo pequeño y no había ningún español, eran todo irlandeses, así que para aprender inglés era la mejor zona, y era un inglés bastante cerrado. Allí trabajé un año, pero como el tema de las granjas no me gustaba mucho, fui cambiando de empresas hasta que llegué a Jacobs, ubicada en Cork, que es una multinacional, y en la que estoy contento. 

- Aquí levantas una piedra y te salen mil trabajos nuevos, el problema es que es difícil encontrar casa. Hay una gran crisis de alojamiento. Ahora el país es de los que más crece de Europa y están todas las empresas grandes del mundo: Apple, Google, Amazon... Toda la gente viene a trabajar aquí, y la oferta de casas no es tan grande, y, además, los alquileres son caros. Están ahora construyendo casas como locos. 

- Para mí la pandemia fue algo "beneficioso", digamos. Me dejaron trabajar desde España para Irlanda, entonces tuve un descanso de Irlanda de un año y algo. Hacía mucho tiempo que no estaba en casa. Seguía teniendo meetings online, etc... Trabajaba desde casa, comía la comida de mi madre, que echaba mucho de menos, pasaba tiempo con mi hermano haciendo actividades...

- La red de aguas del país está un poco anticuada y tenemos 40 estaciones de bombeo que están en bastantes malas condiciones. Tenemos que mejorarlas todas, y estoy haciendo informes de cómo mejorarlas. 

- Los compañeros son casi todos irlandeses. Hay una chica que es de Grecia, pero el resto, todos de Irlanda. En la empresa anterior sí tenía un compañero que era de Segovia, y todavía somos amigos y quedamos para jugar a tenis y a básquet. El ambiente laboral es muy calmado. No tienes presión. Te dejan libertad a tope, si tienes algo que hacer o no puedes ir a la oficina, no te dicen nada. Mientras hagas el proyecto... También siempre añaden personal antes de hacer algún proyecto, y no tienes presión. La verdad es que no he trabajado nunca en España, entonces no puedo comparar tampoco, pero me dicen que es incomparable.

- No sabría decirte... Creo que la personalidad de la gente, es muy multicultural, siempre conoces a mucha gente de todos los sitios, y aprendes cosas de otros lugares. Los paisajes que tiene, la calidad de vida... A pesar de que el tiempo no es como en España, tienes mucha calidad de vida. 

- Aquí normalmente tienes que compartir vivienda, porque a lo mejor sólo una habitación te cuesta 600 ó 700 euros, y si vives en Dublín a lo mejor son 1.000€ la habitación. Ahora yo estoy compartiendo vivienda con otro chico, que es irlandés, en una vivienda para dos que es enorme, con jardín, una cocina grande, una habitación libre... Y, prácticamente, es como vivir solo. Pero claro, depende de la situación de cada uno. También conozco casos en que la gente comparte habitación, porque no le da para más, y se combinan alguien que trabaja por el día y otro por la noche y comparten hasta la cama. 

- El idioma. Al principio, piensas que sabes inglés, pero aquí gastan muchas expresiones que no entiendes. Al principio tienes mucha presión, y tienes meetings, y cosas que hacer, y tienes miedo de no enterarte. Después, cuando tuve que coger el teléfono, sin ver la cara ni los labios...también fue difícil. Pero, a base de práctica y de sufrir un poco, lo haces, incluso ahora en la empresa tengo que dar yo las exposiciones, y son todos irlandeses y yo, el único español. Hay buen ambiente en los meeting, hay comentarios tópicos, como que qué hago en Irlanda con lo bien que se está en España... 

- Son muy simpáticos, alegres y muy serviciales. Son muy diferentes a los ingleses, que son más cerrados. No tengo ninguna queja. Tengo amigos irlandeses y a mí me ayudaron mucho cuando vine aquí. Yo antes vivía en otra casa, y esa gente me ayudó mucho. En pandemia, cuando estuve en España y yo tenía cosas aquí, como por ejemplo un coche que quería vender, ellos me ayudaron y me hicieron muchos favores. 

- Aquí, en cuanto al tema de aficiones, suelo ir a la piscina cubierta a nadar dos o tres días a la semana. Tengo un grupo de WhatsApp de gente de todo el mundo; latinoamericanos aquí hay muchos, franceses, alemanes, etc., y quedamos para jugar a básquet. A parte del básquet, quedamos también para salir. También para salir tengo otro grupo de italianos, españoles, y gente de todo el mundo, en realidad. Quedamos y normalmente el plan es ir al pub. También me gusta hacer rutas por la naturaleza, los acantilados y las playas, también vamos a jugar a vóley. Lo mismo que en España diría, aunque está más limitado por el tiempo. 

- He pensado en cambiar de sede en algún momento, ya que Jacobs tiene sedes en todo el mundo. A España no tengo idea de ir, porque cada vez que he tirado el currículum muchas veces ni me han contestado. Si me saliera la oportunidad de estar en Valencia o en Ontinyent, sí que me lo plantearía. Aquí cada dos por tres estoy recibiendo ofertas. 

- En verano iré. Siempre bajo en verano y, a veces cojo días libres, y como han puesto un vuelo directo Cork-Valencia, la combinación es mejor.