José Antonio Burriel
¡Feliz Año 2017! Todos deseamos, yo lo deseo, o mejor para todos en este año que dentro de pocos días va a comenzar su andadura. Y todos, también yo, tenemos puesta la mirada en algunas cosas y eventos que deseamos tengan lugar en 2017. Bueno, también tenemos en nuestra intención de promesas y metas que estamos dispuestos a cumplir.

Doy por supuesto que no hay persona alguna que no desee el progreso de la sociedad y el bienestar de los ciudadanos. Por ejemplo, que crezca el empleo y disminuya el paro. Por ejemplo, que el terrorismo deje de azotar nuestras vidas y la paz y tranquilidad sean plenas. Y porque no señalarlo por ser muchos los beneficiarios: que se devuelvan cuanto antes y de modo sencillo y asequible las recientemente declaradas nulas de pleno derecho  “cláusulas suelo”, Por mi cuenta añado a estoé deseos: Un Pacto de Estado sobre la Educación, fundamento sólido para el mañana. Y también añado un Pacto de Estado contra la Violencia de género, un pacto que erradique la violencia machista y que genere una sociedad democrática libre y con igual dignidad para todas las personas, sean hombre o mujeres.

Y en cuanto a promesas para cumplir en 2017, allá cada cual con sus afanes de mejora. Yo lo tengo claro para mí: ser más solidario, ser más amigo de mis amigos, seguir tendiendo la mano con generosidad para quien necesite ayuda. Y algo que me gustaría compartir, como promesa para el Año Nuevo, con todos los ciudadanos: erradicar de nuestras vidas, de nuestras relaciones, de nuestros debates el odio, el rencor, la venganza; es decir, desterrar de nuestras vidas todo aquello que empobrece nuestra dignidad de personas. ¡Necesitamos paz y concordia para seguir avanzando en la vida!