Durante las oleadas recurrentes de robos, uno de los asuntos que siempre sale a la palestra es la necesidad de una nueva distribución de competencias entre la Guardia Civil y la Policía Nacional, puesto que la primera es la encargada, con muy pocos agentes, de todo el diseminado, y la Policía Nacional tiene competencias en el casco urbano.
Tras más de tres décadas con esta distribución de competencias, el martes, el delegado del Gobierno en la Comunidad Valenciana aprobó una nueva delimitación territorial, que en el caso de Ontinyent supone iniciar un periodo de transición de cinco años para que la Policía Nacional deje la ciudad y sea la Guardia Civil la que asuma todas las competencias. Esta decisión es paralela a la tomada para Xàtiva, donde la Benemérita dejará de tener presencia y será la Policía Nacional la competente.