La Policía Nacional, con la colaboración indispensable de la Policía Local, está procediendo a actuar con todos sus medios para asegurar la seguridad ciudadana en Ontinyent.
Aunque a principios de semana la situación parecía tranquila, a partir del martes se empezaron a aplicar las primeras sanciones a ciudadanos por no respetar la obligación de confinamiento decretada en el estado de alarma. Entre ellos, un grupo de unas cuatro o cinco personas que estaban ayer martes, sobre las 21:00 horas, presuntamente reunidas, pasando un rato de ocio, en una planta baja de la avenida Almaig. La Policía Nacional no procedió a su detención, pero levantó las correspondientes actas por incumplimiento del Real Decreto, por lo que les llegará la correspondiente multa, y se les instó a confinarse en sus hogares.
Los Cuerpos de Seguridad apelan al “sentido común”, y advierten de la importancia de quedarse en casa. En cuanto a las personas que acuden a sus puestos de trabajo, fuentes policiales indican que el hecho de traer consigo los justificantes expedidos por la empresa facilita el trabajo de los agentes.
Con estas primeras multas, los Cuerpos de Seguridad dan un paso más y empiezan a aplicar medidas serias, ya que hasta el lunes quedaban en avisos, pero con estas primeras multas combaten de forma más drástica a aquellos que se saltan el estado de alarma.
