Las Fiestas de Moros y Cristianos de Ontinyent no son de Interés Turístico Internacional, por más que sean muchos los méritos para ese reconocimiento. De momento, y a la espera de que el Ministerio proceda a conceder tal declaración, las fiestas de este año 2022 ya han conseguido tener algo de internacional, universal, mundial… Sí, el cabreo e indignación de cientos de aspirantes a conseguir unas tribunas desde las que presenciar nuestras Entradas Cristiana y Mora, porque han sentido que la empresa Sillas Gil les ha tomado el pelo.
Comparto la sensación de impotencia que genera comprobar que no te están diciendo la verdad cuando tratas de conseguir información sobre lo sucedido. Si le pedís a Google información sobre Sillas Gil, podréis leer numerosos comentarios de lo más desfavorables de ciudadanos de diversas poblaciones de la Comunidad Valencia y Murcia, en que esta empresa montó tribunas,  y en donde también demostró su incapacidad para gestionar la venta de sillas y tribunas.
Lo mismo que nos ha ocurrido en Ontinyent. Cuarenta minutos antes de la medianoche del 29 de julio al 30, hora de inicio de la venta de tribunas, hubo quienes consiguieron comprarlas, pero a partir de poco más de las cero horas del sábado quedó bloqueada la web.
El presidente de la Societat de Festers, Vicent Pla, a la vista de la caótica venta registrada en la medianoche del 29 al 30 de julio, anunció la venta de 800 entradas cada uno de estos días: martes 2, miércoles 3 y jueves 4. En total 2.400 tribunas. Una venta no menos polémica que la del primer día y que ha dado pie a toda clase de dudas y sospechas sobre la capacidad informática de Sillas Gil (o de la empresa a la que encargó la gestión) para efectuar una labor que cualquier otra compañía seria y competente haría sin problemas. Pero si el miércoles la venta no se inicia hasta las 13,30 porque el encargado de ponerla en marcha “tenía cita con el médico”, no parece que se trate de una empresa solvente y capaz, como en la práctica ha quedado demostrado.
Hoy, jueves 4 de agosto, último día de venta de entradas por internet, yo he vuelto a intentar por medio de ordenador, tableta y teléfono acceder a la web eventosgil.com. Ha sido imposible del todo. Lo curioso es que en la pantalla del ordenador aparecía este mensaje: “Estamos organizando nuevas tribunas. A la venta a partir del 4 de agosto a las 12 horas. Perdonen las molestias”.  En la tablet, una rueda giraba sin cesar  y decía: “Espere un momento por favor o vuelva internarlo pasados unos minutos”, mientras que en el teléfono aparecía que no quedaba ni una tribuna libre en toda la Avenida de Daniel Gil.
Mas que por no poder conseguir unas tribunas, que también, me indigna comprobar que se ha confiado una gestión, que de modo tan directo afecta a nuestras Fiestas de Moros y Cristianos, a una empresa de tan demostrada ineptitud. Indignación que se incrementa cuando quedas enterado de que por cada tribuna que se vende a 13,50 euros, un euro va destinado a gastos de gestión.