El Ayuntamiento de Ontinyent ha finalizado la primera fase de las obras de restauración del Pont Vell, que data del siglo XVI. La actuación que ahora termina, financiada por la Diputación de Valencia, ha permitido recuperar la imagen que el puente tenía a principios del siglo XX. Durante las obras han salido a la luz el antiguo muro de embarque, un arco y una vuelta. Además, se han restaurado los muros de contención y se han construido unas escaleras y rampas en el lecho del rio Clariano.
El concejal coordinador del área de Territorio, Joan Sanchis, que visitaba las obras junto al concejal de Servicios Municipales, Manuel Cuesta, y la concejal de Transporte, Inma Ibáñez, destacaba que esta actuación tendrá continuidad con el proyecto integral recientemente anunciado por el alcalde para acelerar la protección del puente, decisión tomada tras los informes técnicos que indican que el puente padece daños estructurales.
El concejal y también diputado provincial explica que “se trata de una actuación que forma parte del programa Riu Viu, que persigue conservar un elemento clave de nuestro patrimonio, al mismo tiempo que potenciarlo como atractivo turístico y de promoción de la ciudad”. Sanchis recuerda que la rehabilitación del puente estaba inicialmente prevista en cuatro fases, pero ante los informes que alertaban de los daños, se decidió no sólo cerrarlo al tráfico, sino también acelerar la restauración unificando las tres fases restantes en un único proyecto integral”, explica.
Cabe recordar que cada una de las fases inicialmente previstas tenía un coste aproximado de entre 150.000 y 200.000 euros, pero ahora el ayuntamiento de Ontinyent ha puesto en marcha los mecanismos para que se redacte un único proyecto que aborde toda la restauración del puente con la mayor rapidez posible para evitar un mayor deterioro, por un importe aproximado de 720.000 euros.