El Pla Obert de la Diputació de València funciona ya a pleno rendimiento, con más de tres años por delante, para que los municipios y mancomunidades transformen en mejoras reales para las comarcas los 350 millones de euros del plan. El presidente, Vicent Mompó, y la vicepresidenta primera, Natàlia Enguix, han hecho este martes un balance de los primeros proyectos aprobados en el marco del mayor programa inversor.

El presidente Mompó ha destacado la aprobación de las 30 primeras solicitudes presentadas por los ayuntamientos, que además de obra nueva incluyen la adquisición de bienes inmuebles, suministros y maquinaria, y ha avanzado que el área de Cooperación “prevé tener aprobados más de un centenar de proyectos antes de las vacaciones, lo que demuestra que hemos adelantado los tiempos de presentación y que los municipios van a tener todas las facilidades para definir sus prioridades y darles respuesta con ayuda de la Diputación”.

En este sentido, Mompó considera que los alcaldes y alcaldesas “están satisfechos con un nuevo modelo que acerca la institución al territorio, a los municipios y a sus problemas. Pero también están satisfechos con una gestión que más allá de los grandes programas, como el Pla Obert o el Fondo de Cooperación, ha apostado por las ayudas para el patrimonio histórico y ha abierto otras líneas para la mejora de las infraestructuras hídricas, la rehabilitación de cuarteles de la Guardia Civil y la recuperación de "trinquets" en nuestros pueblos, entre otras ayudas”.

Respecto a la esencia del Pla Obert, “los ayuntamientos son los que eligen, en eso no hemos cambiado nada”, apunta Vicent Mompó, quien insiste en que “la diferencia es que ahora no tienen la presión de presentar los proyectos en un plazo determinado, ya que pueden hacerlo en cualquier momento del año, y la Diputación estará ahí no solo para financiarlos, sino para acompañarles en el proceso y que no tengan que renunciar a las ayudas”.

Más de cien proyectos en marcha
La vicepresidenta Enguix, responsable de Cooperación Municipal y de la puesta en marcha del novedoso Pla Obert d’Inversions, ha detallado las solicitudes presentadas por los ayuntamientos hasta la fecha y la temática de los proyectos. En cifras, “hemos recibido 149 solicitudes, de las cuales 92 corresponden a obras, 45 a suministros y 12 a adquisición de bienes inmuebles por parte de los consistorios. De todas ellas, 30 han sido ya aprobadas, 93 están en fase de concesión y se espera que se concreten durante este mes, y 26 están siendo revisadas”, ha explicado Enguix, quien avanza que antes de agosto “tendremos aprobados unos 120 proyectos frente a los cero proyectos aprobados a estas alturas en el plan anterior”.

Los proyectos aprobados “pertenecen a 24 ayuntamientos de 10 comarcas, y destacan las actuaciones propuestas en materia de mejora del ciclo del agua y las instalaciones deportivas, así como la recuperación de edificios para uso social, obras de urbanismo y eficiencia energética y adecuación de espacios como piscinas o campos de fútbol”. “Conviene que las iniciativas presentadas sean prioritarias para los ayuntamientos y que tengan muy claro que van a dar respuesta a estas necesidades, que se acabarán ejecutando en los próximos meses junto a otros proyectos que nos plantearán estos y otros municipios en el marco del Pla Obert”, añade la vicepresidenta.

Natàlia Enguix insiste en que lo más importante “es que cada municipio presente sus proyectos cuando estén maduros, cuando estén seguros de que van a ejecutarlos. Para ello hemos adelantado la puesta en marcha del plan y hemos abierto un plazo ininterrumpido de presentación para facilitarles el procedimiento”. A partir de aquí, “el equipo de Cooperación que dirige Pedro Domingo está a su disposición para resolver cualquier duda, como han hecho hasta el momento en las distintas jornadas que hemos organizado del Pla Obert en la Diputación y en las comarcas, con gran respuesta de los responsables y técnicos locales”.


Agua, deporte y usos sociales
Entre las solicitudes aprobadas encontramos proyectos de mayor cuantía, como los 560.000 euros que destinará Montserrat a comprar un solar para uso municipal en la Avenida Jaime I, los 500.000 euros presupuestados por Canals para renovar íntegramente el campo de fútbol, o los 390.000 euros con los que Carcaixent habilitará un edificio de la calle Santa Anna para centro de servicios sociales.

Pero también hay demandas como el robot limpia piscinas de El Palomar (5.000 euros); la instalación de la valla del polideportivo de Tous (15.000 euros); o la adecuación a la normativa actual de la piscina de Alfauir (15.000 euros). “No importa solo el dinero, sino la necesidad que en cada momento tenga el municipio y la respuesta rápida, sin la presión de los plazos, que le demos desde la Diputación para que los proyectos de mejora se conviertan en realidad y el equipamiento y los suministros lleguen a nuestros pueblos”, señala Enguix.

La responsable de Cooperación Municipal apuesta por “hacer didáctica para explicar unos cambios que tratan de mejorar la eficacia del plan e incrementar el nivel de ejecución de las propuestas presentadas”, y recuerda que desde el área de Cooperación que dirige “se premiarán los proyectos rompedores que contribuyan a transformar nuestros pueblos y ciudades, caso del urbanismo con perspectiva de género que estamos promoviendo, y que acercaremos al personal técnico a través de jornadas específicas con ejemplos concretos de cómo podemos mejorar la calidad de vida en los municipios”.