El presidente de la Diputació de València, Vicent Mompó, ha firmado el decreto de adjudicación de las obras de regeneración ambiental en los municipios afectados por el conocido como ‘incendio de Montitxelvo’, tras la declaración de emergencia que permite la “inmediata ejecución de las actuaciones” en la zona.

Será el área de Medio Ambiente de la institución provincial, dirigida por el diputado Avelino Mascarell, la que coordine los trabajos que llevarán a cabo nueve empresas del sector medioambiental, en su mayoría valencianas. Mascarell, que también encabeza el área de Desarrollo Rural, incide en “el impacto de este suceso en unos municipios que ya venían abordando el reto de la lucha contra la despoblación, y ahora se les ha sumado el de la recuperación ambiental, tras arrasar el fuego gran parte de su entorno natural”.

“La Diputació -continúa el diputado- da respuesta, así, a las necesidades que se extrajeron de la evaluación técnica realizada por los técnicos, que tras el siniestro empezaron a trabajar en cooperación con los ayuntamientos de los municipios afectados, que no disponían de medios materiales ni personales para acometer de manera autónoma estas actuaciones”, y aclara que “todo el proceso se ha llevado a cabo de acuerdo con la Conselleria de Medio Ambiente, Agua, Infraestructuras y Territorio, como Administración forestal”.

Así, las actuaciones programadas parten del ‘Informe sobre el Impacto del Incendio Forestal de Montitxelvo’, emitido por la Fundación CEAM dependiente de la Generalitat Valenciana, y que realiza un profundo análisis del impacto del fuego en los municipios afectados por el incendio, con una superficie quemada de más de 2.300 hectáreas.


Actuaciones en ocho municipios
Las labores de restauración ambiental postincendio se iniciarán de manera inmediata en los términos municipales de Ador, Aielo de Rugat, Alfahuir, Castellonet de la Conquesta, Llocnou de Sant Jeroni, Montitxelvo, Terrateig y Villalonga. Para ello, se ha destinado una partida extraordinaria de 1,5 millones de euros, para la adjudicación de 9 contratos correspondientes a otros tantos lotes en los que se han dividido los trabajos.

En todos los casos, el objetivo final es la recuperación de la cubierta vegetal y del valor paisajístico de la zona afectada. Para ello, se incide en la “prevención de los fenómenos erosivos a fin de mantener el suelo que será el soporte de la próxima cubierta vegetal; el fomento de la recuperación de la fauna silvestre y de la flora autóctona; la disminución del flujo superficial de aguas a fin de evitar daños en zonas exteriores al monte; y la defensa de las masas forestales de las plagas y enfermedades”.

Para ello, se mejorará la transitabilidad de los caminos forestales, se apearán los árboles quemados a través del fomento de su aprovechamiento para la construcción de barreras antierosión en las laderas y se construirán diques con la restauración de la mampostería de bancales cuando exista riesgo de erosión o desmoronamiento.

Asimismo, las actuaciones prevén el tratamiento o extracción de pies que supongan un riesgo fitosanitario y la construcción de infraestructuras para el fomento de la fauna silvestre. De manera paralela, los ayuntamientos se encargan de las autorizaciones de la propiedad de las parcelas forestales y de la Generalitat, como administración competente en materia de planificación y gestión forestales; con el apoyo de los servicios técnicos de la Diputación para la identificación de titulares de los terrenos, redacción y envío de comunicaciones, publicaciones de edictos y preparación de la documentación necesaria.