Fue el partido del año. Con esa sensación abandonaron el pabellón los asistentes al duelo entre el Eset Ontinet y el Altea, un partido donde el capital ofensivo se hizo más importante que nunca en un duelo entre dos equipos con una gran facilidad para anotar.
El encuentro empezaba bien para los colegiales, que de nuevo mostraron la facilidad para anotar a base de triples de Jorge Soler, Sergio Gómez i Vicent Galbis. Los de Altea, que ya en el calentamiento habían mostrado un gran acierto en el tiro, empezaron más tímidos, pero poco a poco fueron mostrando de lo que eran capaces.
El encuentro parecía controlado para los ontinyentins, pero nunca acababan de romperlo de forma definitiva debido a una gran garra y lucha de los alicantinos, que les sirvió para estar siempre bailando sobre los 10 puntos de desventaja, acercándose en ocasiones, pero sin conseguir nunca una ventaja. El tercer cuarto acababa con los colegiales 11 arriba, pero con la sensación en las gradas que el encuentro no estaba ganado ni mucho menos.
El último cuarto dio la razón a aquellos que no veían claro el encuentro, puesto que los visitantes, con un excelente parcial y aprovechando que los locales vivieron momentos de bloqueo ofensivo consiguieron no solo reducir la ventaja sino incluso ponerse por delante por primera vez aprovechando un fuerte juego interior y el problema de las 4 faltas de Alin Voinea, pívot de los colegiales. Precisamente la salida a pista del rumano fue una bocanada de aire fresco para un Eset que tuvo en Jorge Soler e Iker Barbero los puntos que necesitaban para no descolgarse, y en un triple extraordinario de Vicent Galbis se volvieron a poner por delante a poco más de minuto y medio para el final. Unos dobles, un rebote ofensivo de Alin y una canasta de Iker Barbero pusieron el +4, los visitantes anotaban y hacían una falta rápida con el +2 para los ontinyentins, y cuando más tiemblan las manos, Iker anotó los dos tiros libres para poner el 93-89, el Altea volvió a anotar y después no tuvieron tiempo para hacer la falta personal.
Al final, una victoria muy trabajada para un Eset Ontinet que el día del Partido Benéfico regaló a sus aficionados uno de los mejores partidos del año y a buen seguro que uno de los mejores partidos de la temporada, un encuentro de los que hace afición y que encima se llevaron, sumando la tercera victoria en la clasificación y dejando atrás el tropiezo en Elche.