Mucho se había especulado sobre la situación de Orlando Ortega con su inoportuna lesión poco antes del inicio del sueño olímpico de Tokyo. Desde el alzamiento del confinamiento y el inicio de las competiciones, el atleta hispano-cubano, muy arraigado en Ontinyent, se había mostrado como el más fuerte de todos los vallistas y claro candidato a medalla olímpica, y por qué no pensar en la más codiciada de todas, la de oro.
Cuando mejor estaba Ortega, una inoportuna y molesta lesión lo apartó el pasado 7 de marzo de las pistas. Quedaban todavía muchos meses por delante para los juegos olímpicos, pero una y otra carrera Orlando Ortega era baja por la lesión, un neuroma de morton, un enquistamiento de un nervio al dedo que penaliza la biomecánica del atleta en una prueba tan explosiva y técnica, según explican expertos en la materia. Tokyo se acercaba y el sueño olímpico se esfumaba para el actual subcampeón olímpico y tercero clasificado del Mundial. Las pruebas iban agotándose, y el atleta, ontinyentí de adopción y de devoción no tenía la mínima para unos Juegos Olímpicos que iban a llegar en la plenitud de su carrera, 30 años, y que parecían cada vez más lejos.
Este fin de semana se celebraba el campeonato de España de Getafe, y ahí sí tenía lugar la vuelta a las pistas de un Orlando Ortega que llevaba más de 3 meses de ausencia y que durante su ‘KO’ había visto como salían nuevos rivales a superar, sobre todo un Asier Martínez que había estado ganando todas las pruebas de ámbito nacional. Así pues, un campeonato de España mucho más interesante que de costumbre, donde Orlando Ortega debería de darlo todo para el doble objetivo; ser campeón de España y sobre todo, conseguir mínima olímpica.
Una carrera mucho más interesante e igualada que otros años, un Asier Martínez que no daba tregua al hispano-cubano durante los 110 metros y 10 saltos de vallas de la prueba. Finalmente Orlando Ortega hizo valer su condición de mejor saltador de vallas nacional de la historia para proclamarse campeón con una marca de 13.30, 1 centésima por delante de su rival, un Asier Martínez subcampeón. A pesar de la victoria, la marca de 13.30 está muy lejos de los 13.11 que marcó el pasado 2020 después del confinamiento, mejor marca mundial del año, y sobre todo muy lejos del 12.94 que consiguió en 2015, todavía bajo la nacionalidad cubana o del 13.04, el récord de España, en propiedad suya desde 2016.
Lo más importante de este 13.30 y de este campeonato nacional es que se ha convertido en mínima olímpica. Con esta prueba Orlando Ortega, siempre y cuándo (y esperamos que así sea) la lesión lo deje participar. Por delante dos importantes pruebas para recuperar el tono físico y las sensaciones, una de ellas se disputará este miércoles en Polonia, y la próxima en Hungría el próximo martes 6 de julio.
La gran esperanza del atletismo español, el gran ídolo de los atletas y no atletas ontinyentins, está de vuelta, una vuelta eso sí, con el contrarreloj activado para buscar llegar a Tokyo a finales del mes de julio. Quién seguro que no estará en  Tokyo después de acabar último en las pruebas de Jamaica es el único que pudo superar a Ortega en Rio 2016 Omar McLeod. En este caso el polémico vallista jamaicano no será rival de Orlando Ortega después de las últimas polémicas por las malas acciones del caribeño, tanto con Ortega como con el resto de vallistas.