La Plataforma por la Reindustrialización Territorial, integrada por COEVAL (Confederación Empresarial de la Vall d’Albaida), IBIAE (Asociación de Empresarios de Ibi y Comarca) y FEDAC (Federación Empresarial de las Comarcas de l'Alcoià y El Comtat) ha llevado a cabo una video-reunión en la ha valorado “positivamente” el Plan Resiste y ha pedido a su vez agilidad y rapidez en las ayudas. 
En este sentido, la Plataforma, que representa territorialmente en las comarcas de la Vall d’Albaida, l’Alcoià-El Comtat y la Foia de Castalla a los distintos sectores económicos de las tres comarcas, destacó del Plan Resiste, dotado con 340 millones de euros, que “incluye ayudas directas para sectores y autónomos afectados y puede evitar el cierre de empresas viables y la pérdida de puestos de trabajo”, explican, y valoran como muy positivo, que “nace gracias al acuerdo alcanzado por la administración autonómica y local, empresas, autónomos y sindicatos”.  
Por otro lado, consideran “primordial” que para que el Plan Rescate sea efectivo debe ser “muy ágil en su puesta en marcha y evite burocracia innecesaria que sólo consigue retrasar unas ayudas que de forma urgente necesitan empresas, autónomos y trabajadores”. En caso contrario, aseguran, “producirán un efecto boomerang de expectativas defraudadas, cierre de empresas y pérdida de puestos de trabajo en unos momentos muy críticos”, añaden.
Finalmente, la Plataforma ha pedido que la Generalitat incluya en el Plan Rescate al pequeño comercio no esencial que “tiene un perjuicio sostenido desde el pasado mes de marzo en que se inició la pandemia, ejemplo del cual son las malas campañas de Navidad y Rebajas que están sufriendo”, apuntan. 
En este sentido, destacan que el sector comercio representa en la Comunitat Valenciana el 12% del PIB y da empleo a más de 300.000 trabajadores, y actualmente tiene un 30% de pequeños comercios en riesgo de cierre acumulando unas perdidas de más de 6.000 millones de euros. Desde la Plataforma consideran fundamental la ayuda al pequeño comercio, que “lleva desde hace tiempo un esfuerzo por digitalizarse para sumar a su carácter presencial, ante la competencia de gigantes tecnológicos comerciales”, comentan. Por ello, afirman que “la Administración debe implicarse activamente en su defensa por el valor añadido que supone además para la Comunitat Valenciana, con elevadas tasas de turismo que requiere el complemento del pequeño comercio para hacer más atractiva su oferta”, concluyen.