Qué hacer con los miles de colchones que se retiran cada año en España es un problema que ha encontrado solución con una tecnología ideada patentada por el ontinyentí Enrique Palma y que, junto a sus socios en la empresa Ecoaqua, verá la luz en breve, cuando entre en funcionamiento la maquinaria que están terminando de instalar en una nave del Polígono L’Altet, con capacidad para reciclar 200.000 colchones al año.
Según explica el autor de este innovador sistema, se trata de un sistema que modula  la acción del agua a presión a partir de seis parámetros, como velocidad de entrada, sistema de cierres o estanqueidad, para proyectarla sobre el objeto a reciclar, con el efecto de una trituradora, a través de toberas con agujeros.
 Gracias a esta acción, se pueden aprovechar todos los materiales utilizados para fabricar los colchones, desde los muelles, hasta los componentes textiles. Actualmente, los muchos colchones que quedan en desuso cada año son trasladados a los vertederos, donde son triturados, pero tan solo se aprovecha el hierro. Con el nuevo sistema patentado por Ecoaqua, se reaprovechan todos los materiales. Por ejemplo, la parte de textil y espuma se puede reutilizar para nuevos colchones, pero también puede volver a la cadena de valor para crear losetas o placas de insonorización.
“Ningún sistema de separación de componentes actual consigue este nivel de calidad de extracción”, afirma Enrique Palma a LOCLAR. Además, sus patentes consiguen que, una vez sanitizada, se pueda devolver al sistema el 95% del agua utilizada en los chorros y que el consumo energético sea inferior en un 50% al de las máquinas de triturado.
Después de mostrar su innovación a ingenieros de grandes corporaciones como Pikolín y Ferrovial, se han visto confirmados los ambiciosos planes del cuarteto de accionistas de Ecoaqua Colchones, que completan Julián Masiá, Francisco Larrey y Santiago Gómez-Trénor: en agosto tienen previsto inaugurar una nave de 1.600 metros cuadrados en el Polígono L’Altet de Ontinyent con capacidad para tratar 200.000 colchones al año
Enrique Palma obtuvo la patente en 2013 para el reciclaje de neumáticos y tras años de pruebas se aplicará ahora en colchones. El sistema ha despertado el interés tanto de empresas como de administraciones públicas, no solo de España sino también de otros países como Alemania, Francia o Italia. 
Todo el proceso está gestionado por un sistema informático que es capaz de adaptar de forma automática, los parámetros de proyección del agua atendiendo a las características particulares de cada uno de los objetos que pasan bajo los chorros.

Diseñada y creada en Ontinyent
El proyecto no solo nace y se implantará en Ontinyent, sino que la maquinaria para aplicar este novedoso sistema la está fabricando la empresa ontinyentina Tacome. De esta manera, destaca Enrique Palma, se cumple su idea inicial de poder establecer la nueva tecnología en Ontinyent. La empresa empezará con una plantilla de 11 personas por turno, que se incrementarán a medida que amplíen los turnos y la maquinaria.
Desde la concejalía de Promoción Económica del Ayuntamiento de Ontinyent, el concejal Pablo Úbeda destacaba la importancia de que empresas innovadoras se instalen en Ontinyent. En este caso, una empresa que contribuye a diversificar la economía local al mismo tiempo que aporta un innovador sistema que contribuye a la sostenibilidad.