El Ontinyent juega por segunda semana consecutiva en El
Clariano. Si la semana pasada visitó el estadio municipal recién remodelado un
equipo de la parte alta, el Novelda, en esta ocasión llega el colista, el
Segorbe, que sólo ha ganado un encuentro en lo que va de liga, para un total de
7 puntos.
El partido es, a priori, de aquellos en los que todo lo que
no sea ganar sería romper los pronósticos, pero tanto la plantilla como el
cuerpo técnico no se fían del rival.
Miguel Ángel Mullor no podrá contar con Juanan, que deberá
cumplir un partido de sanción por acumulación de amonestaciones. Tampoco podrá
ser de la partida Alberto Abengózar, lesionado.
Dada la diferencia en la clasificación, es más que probable
que el Segorbe salga a defender y estar bien ordenado, a la espera de poder
aprovechar algún error o alguna contra, por lo que además de atacar, el
Ontinyent también deberá mantener la concentración para evitar estos dos
factores.
Si los tres puntos ante el colista son de por sí
importantes, aún lo es más, porque la jornada depara dos enfrentamientos
directos entre los equipos que anteceden al Ontinyent en la clasificación: el
líder, el Olímpic, recibe al Alzira, que es cuarto con los mismos puntos que el
Ontinyent; mientras que el Novelda, que es segundo con dos puntos más que el
Ontinyent, se enfrentará al Castellón, tercero con un punto más que el equipo
de el Clariano. Es decir, si el Ontinyent gana al Segorbe, va a recortar puntos
a unos o a otros, lo que le permitirá escalar posiciones y seguir con opciones
de jugar la promoción de ascenso.
El Ontinyent jugó ayer jueves un encuentro amistoso contra
el Aielo, un partido que fue planteado como una parte más de la preparación del
encuentro ante el Segorbe.